España es el séptimo país europeo que más comida tira a la basura. En un periodo de inflación desbocada y rozando los dos dígitos, con la cesta de la compra mucho más cara que hace un año, llama la atención la enorme cantidad de comida que no consumimos.
Cada año, tiramos a la basura 250 euros de comida por persona al año. Esto supone 28 kilos por individuo, una enorme cantidad compuesta sobre todo por frutas, verduras y hortalizas, productos frescos que se ponen malos muy rápido si no se consumen. Les siguen el pan y la bollería.
A Cristina Cifuentes le ha llamado mucho la atención este dato: “Y luego personas recogiendo la comida que nosotros tiramos de la basura”, ha reflexionado. Además, ha comentado que una posible solución a este desperdicio de comida: “Acostumbrarnos a hacer lo que hacían nuestras madres. Las sobras de la comida, reutilizarlas todo lo que se pueda”.
Joaquín Prat ha destacado que “hay muchas personas con dificultades para llenar la nevera, imagínate si no van a hacer una buena gestión de lo que ahí tienen, con lo que se está encareciendo la vida”.