‘Ya es mediodía’ se ha puesto en contacto con Óscar, el administrador de la finca en la que Borja Escalona estuvo viviendo durante cuatro años, quien nos ha contado el infierno que tuvieron que vivir los vecinos del influencer.
El polémico youtuber estuvo habitando esta casa durante cuatro años y llegó a montar en ella su propio reality show. Óscar nos cuenta que llegaron todo tipo de moradores a la finca y que la mayoría era “gentucilla” con la que hubo “verdaderos problemas”.
“Tuvieron que aguantar mucho los vecinos”, explica nuestro entrevistado. “Dentro se hacía un reality, se hacían fiestas, se tiraban cohetes a deshoras y conducían por la calle como querían”, explicaba el administrador de la finca.
“Hubo quejas de vecinas a las que Borja Escalona grababa desde su propio balcón para luego subirlas a redes sociales sin autorización (..) Conducía en sentido contrario para evitar toda la vuelta y tuvo muchos problemas con los vecinos”, añadía Óscar.
El administrador nos cuenta que el youtuber no pagaba el alquiler y nuestro programa tiene constancia de que debe 50.000 euros a la propietaria de la casa, así nos lo ha confirmado ella misma. “Tardaron mucho tiempo en echarle (..) hacía fiestas y venía la Policía”, aseguraba Óscar.
Tal como cuenta nuestro invitado, la casa quedó destrozada y la propietaria tuvo que limpiarla “de arriba abajo” porque la había dejado “muy sucia”.