Gloria tenía solo diez años cuando su madre falleció por un agresivo cáncer. La joven ha explicado que ni ella ni su hermano eran conscientes de lo que sucedía: “No nos contaron nada hasta el día en el que falleció. A la mañana siguiente mi tía y mi prima me dijeron que había una nueva estrella en el cielo”.
De esta manera Gloria Camila se enteraba de que su madre no había superado la enfermedad: “Según pasan los años vas notando más su ausencia, nuestra vida cambió pero mi padre hizo de madre y de padre para que no sufriéramos”. Sin embargo, también ella fue un apoyo fundamental para Ortega Cano: “Yo le veía llorar todos los días, el amor de su vida ya no estaba”.