Malcom Sousa trabaja bajo las órdenes de Nemo Bandeira desde hace algunos meses, pero su nuevo empleado no es tan leal como a él le gustaría. Sin escuchar los deseos de su jefe, Malcom se pone de parte de su hija ilegítima y le echa una mano para que el juez agilice su decisión y pueda desconectar a su madre de la máquina que la mantiene con vida.