La siesta, un placer reparador

La siesta es una de las tradiciones más características de España. Echarnos un ratito después de comer se ha convertido en una costumbre española que, muchas veces, se ve de forma curiosa en otros países. Sin embargo, si se hace siguiendo unos parámetros concretos puede aportarnos grandes beneficios.

1. ¿CUÁL ES LA MEJOR HORA?

Los científicos afirman que tras la comida las personas experimentan un mayor grado de somnolencia y desconcentración. Por lo que, la mejor hora para echarse la siesta sería a las 3 de la tarde, más o menos, pero nunca más tarde de las 5. Llevar una rutina diaria organizada es importante, y en ello también entra la siesta. La mejor hora para comer son las 2 de la tarde, pero dependerá de nuestras rutinas, aunque no se recomienda que sea pasadas las 5 de la tarde.

2. ¿CÚANTO TIEMPO DEBE DURAR?

Lo dice la ciencia: nuestro cuerpo tiene un reloj interno atado a los ritmos circadianos que, si no son respetados, pueden acarrear cansancio e incluso problemas de salud. Lo recomendable es que dure entre 20 y 30 minutos. Si el sueño se prolonga más de una hora y media puede trastornar el descanso de la noche. Sin embargo, si se respeta este periodo, la siesta puede ser muy saludable y mejorar el estado de alerta y el rendimiento sin despertarnos excesivamente aturdidos. Recuerda que es una forma de completar el descanso nocturno, pero no de sustituirlo, por lo que no debes distribuir las horas de sueño entre el periodo nocturno de dormir y la siesta, de esta forma alterarías los ritmos del sueño.

3. ¿ES BUENA SIEMPRE?

La siesta es un sueño reparador que no siempre necesitamos; no debes establecerla como costumbre habitual. Procura reservar este momento para aquellos días en los que te sientes más cansado. Se recomienda principalmente para los días en los que has realizado un esfuerzo físico extra o fuera de lo habitual; o para cuando has dormido poco la noche anterior.

4. EL MEJOR LUGAR PARA DESCANSAR

Recuerda que no es el comer lo que nos da sueño, sino un fenómeno fisiológico. Aunque sea un sueño corto de 30 minutos, al igual que durante el sueño nocturno, si no adoptamos una postura correcta podemos acabar con problemas de dolor muscular, algo mucho peor que el cansancio. Lo mejor es echarnos la siesta en la cama, en las mismas condiciones en las que dormimos por la noche, aunque también puedes hacerlo en el sofá, siempre y cuando cuides la postura.

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