Kiko Rivera se encuentra, una vez más, en el ojo del huracán. Su examante Techi ha regresado a los focos mediáticos para hacer públicas unas supuestas deslealtades del hijo de Isabel Pantoja a su mujer, Irene Rosales. A raíz de esto, han surgido nuevos testimonios. Él se defenderá en ‘Sábado Deluxe’ pero Irene está en ‘Viva la vida’ para hacer frente a esta polémica.
Irene lo tiene claro. No da veracidad a los rumores y, es más, se muestra muy tajante a la hora de afirmar que “lo que venga de Techi tiene poca credibilidad”. Confirma que no hay crisis en la pareja, que no están enfadados y que el matrimonio está “todas a una”.
La mujer de Kiko admite que este asunto no le duele, pero sí le afecta porque “si tengo que dar un paseo con mi hija y tengo prensa en la puerta para preguntar algo que me duele. También me molesta que se suba gente al carro”, le confiesa a la presentadora en una íntima charla nada más comenzar el programa.
Además, Irene dice que “en siete años hemos tenido muchos momentos felices pero también otros momentos malos, pero es verdad que se queda en la intimidad de mi casa. Sí que es cierto que en esos momentos malos han podido pasar ciertas cosillas”. Emma García considera que hay tristeza en sus ojos e Irene dice que no ha sido un buen año, pero que esto no le afecta ni en su matrimonio ni en su familia.
"Él ha cometido sus fallos, pero eso es cosa de mi marido y mía. Y que no diga que llevo cuernos porque yo cuernos no llevo, porque no soy ningún animal", unas palabras que han arrancado los aplausos de sus compañeros en plató. Respecto a Alicia, admite que fue verdad que ella se puso en contacto con la camarera para decirle que se le alejara de su matrimonio. Pero no fue a través de mensajes pillados en el móvil de Kiko: "Fue una sexto sentido. Pero me arrepiento de lo que hice y supe que iba a salir".
Todo esto sucedió a mediados de enero, cuando la pareja está sufriendo "un bache". Irene estaba viviendo una mala etapa tras perder a su madre y "Kiko no estuvo a la altura", pues se refugió en Alicia, a quien enviaba mensajes subidos de tono. Pero Irene y Kiko superaron esta crisis, aunque reconoce que les costó. Ella no solo le perdonó, sino que le dio las gracias más adelante, cuando ella consiguió superar la muerte de su madre gracias a su ayuda.
"Él ha metido la pata, pero no hay que crucificarle", añade Irene, que dice que le ha perdonado y que cuando ella perdona, ya olvida. Además quiere comentarnos que ella estaba con muy mala actitud cuando murió su madre y que Kiko pensó que ella ya no estaba enamorada de él. Es por ello por lo que cometió ese error en su relación.
Irene Rosales reconoce que Isabel Pantoja les ha aconsejado como pareja pero que no se suele meter en su relación y si lo hace, es para ayudarles a superar sus baches. Les ha llegado a decir que no tienen que rendir cuentas a nadie porque sus problemas ya los han solucionado entre ellos.