Esta semana se ha hablado mucho sobre una posible crisis entre Ana María Aldón, la nueva colaboradora de 'Viva la vida', y su marido Ortega Cano. Ana María ha llegado hoy visiblemente enfadada ya no solo por los constantes rumores, si no por un conflicto que ha tenido con el paparazzi Diego Arrabal.
Al parecer, en la reunión previa al programa. Diego Arrabal le ha contado a Ana María que tiene en su poder unas fotografías en las que se ve a la diseñadora en compañía de un hombre. La mujer de Ortega Cano no se ha tomado nada bien que Diego siempre la duda sobre su relación o sobre una posible infidelidad por su parte.
Además, la nueva colaboradora tampoco se ha tomado bien que el programa se haya hecho eco de los rumores de crisis y ha contestado alto y claro:
"No sé de dónde se saca esa información porque no es para nada cierta (…) La revista que ha publicado eso nos podría haber llamado para confirmar la noticia, no existe ninguna crisis entre mi marido y yo (…) Ahora mismo mi marido y yo estamos en uno de nuestros mejores momentos (…) No es cierto que haya habido desacuerdo entre José y yo porque yo esté trabajando aquí".
Además, Ana María ha confesado su gran malestar por los comentarios que se han vertido estos días sobre las presuntas malas condiciones en las que se encuentran las casas de su hija y de su madre. La colaboradora ha defendido que tanto su hija como su madre viven perfectamente con todas las comodidades posibles y que le ha dolido mucho que se diga que la casa de su madre tiene goteras: "Mi madre vive perfectamente y no le falta de nada, ella vive de sus tres pensiones, una de aquí de España y dos pequeñas pagas que tiene de Francia".