Este jueves, en ‘Vamos a ver’, la periodista Isabel Rábago ha comentado las palabras que le ha dicho Barbara Rey después de que se conociera la entrevista que ha realizado su hijo, Ángel Cristo. Por primera vez, el hermano de Sofía Cristo rompe su silencio y concede su entrevista más esperada en el estreno de ‘¡De Viernes!’, el nuevo programa de Santi Acosta y Beatriz Archidona para las noches de Telecinco.
Isabel Rábago ha contado lo mal que está Barbara Rey: “Me da exactamente igual lo que diga. No voy a hablar de las palabras de mi hijo, no voy a cuestionar ni una sola palabra, no vamos a hacer ningún tipo de declaración, ni yo, ni Sofía”.
Además, Rábago ha comentado que Barbara Rey lleva desde que se anuncia la entrevista públicamente absolutamente destrozada: “Hace mucho tiempo que no la veía así”, añade la periodista.
Bárbara Rey es la mujer más buscada del momento y las cámaras de 'Vamos a ver' han podido dar con ella. En Marbella, la ex de Ángel Cristo ha preferido no pronunciarse sobre la entrevista de su hijo.
Este jueves, en 'Vamos a ver', Pepe del Real ha desvelado los motivos por los que Ángel Cristo habría decidido hablar ahora: "Tiene una deuda por una pensión de manutención", ha apuntado el periodista como motivo de esta entrevista.
"Hay una motivación económica. Existe una deuda por una pensión de manutención que no está pagada con la mamá de su hija. Por dinero está hablando y por dinero sería capaz incluso de atribuirle a terceras personas la paternidad de su hermana", ha contado el periodista.
Todo el mundo ha hablado en la historia de Bárbara Rey y Ángel Cristo. Ha sido mucha gente la que se ha sentado en platós de televisión para contar su versión de los hechos, pero nunca habíamos oído pronunciarse al hijo de la vedette y el domador de circo sobre la mediática vida de sus progenitores.
“La casa de La Moraleja es una pesadilla, es un infierno. Había peleas, gritos, mucho miedo y sangre. Mi miedo era que no mataran a mi madre. Mi padre se descontrolaba muchísimo más”, explica en la entrevista que concedió a Santi Acosta.
“En esa casa empezó a entrar y a salir gente, drogas, alcohol, prostitutas. Mi madre, desde que llegaba a casa del colegio, me cargaba de responsabilidades hasta que se iba l a luz del día. Le daba igual que tuviera colegio, o exámenes”, apunta el hijo de Bárbara Rey.
Cuando le preguntan por ella, se muestra muy contundente: “La verdadera pesadilla no era mi padre, era mi madre. La he visto gastarse mucho dinero en el casino: desde 100 a 30.000 euros en una noche”, declara, muy firme el hijo de Bárbara.