La carrera televisiva de Rafa Mora comenzó nada más bajar las escaleras del programa de 'MyH'. Corría el año 2009 y el valenciano fue el sexto pretendiente para Soraya después de su desengaño con Efrén. El 'tete' más mediático bajó las escaleras con camisa blanca ceñida y marcando músculo por castigo. Se pegó una ligera carrera para casi ir encuentro de Soraya y así evitar que esta tuviera que levantarse. Cortesía ante todo.
Tras el primer contacto, el nuevo pretendiente siguió sumando puntos con la tronista. No solo presumió de físico y se levantó la camiseta haciendo gala de abdominales y convirtiendo este gesto en icono inconfundible de que estábamos ante Rafa Mora, sino que también demostró su vena más de poeta y que a la hora de venderse al valenciano no le hacía falta abuela.
El pretendiente de un modo galante le regaló los primeros piropos a Soraya y, aunque Miriam Sánchez hiciese de abogado del diablo para que la tronista no se deslumbrase con sus músculos, Rafa Mora tiró de dichos populares como que "el tiempo pone su ley" y así dejaba ver que detrás de aquel imponente físico también había un cerebro de lo más privilegiado.
Desconocedor de todo el culebrón que había rodeado a la 'Campanilla' del programa porque confesaba que "no había visto ni 15 minutos de 'MyH'" le dio otro brillante consejo a la tronista: "No dejes que tu pasado, marque tu presente ni dirija tu futuro". Una cita épica digna de los grandes de la literatura. Y acto seguido se enzarzaba con Astry en una discusión de lo más acalorada simplemente porque a la gancho del programa no le gustaba ninguno de aquellos candidatos y Rafa Mora estaba hecho para SIEMPRE gustar.
Había llegado Rafa Mora para acaparar la atención y, si alguien lo dudaba todavía ya estaba él para advertirnos de que "esa carita" prometía muchas horas en televisión mientras se tocaba la barbilla en otro de sus gestos de lo más característicos.