La conocimos por primera vez vistiendo un traje flamenco despampanante y amarillo para representar a su tierra, Sevilla. Sin embargo, el color que convirtió a María José Suárez en la guapa oficial de España en 1996 y también en Miss de Telecinco fue el blanco roto propio de los vestidos de novia. Un color que jugó un papel muy importante en su camino y que ahora a buen seguro habrá sido una de sus apuestas para su gran boda griega en Santorini con Jordi Nieto.
Esa primera pista de aquel color con el que la modelo estaba destinada a brillar nos dejó la imagen de una tímida María José Suárez que se ruborizaba con los halagos del presentador Goyo González hacia su mirada y que prefería no mojarse en la cuestión que le planteaba el jurado: ¿Qué hay en ti que sea más importante para un hombre? La Miss lo tenía claro. Aquella cuestión la tendría que responder un hombre y a día de hoy ya cuenta con nombres y apellidos: Jordi Nieto.
Además de enamorarle a él, la modelo conquistó a todos hace 22 años con traje regional, de baño o de flamenca. Todo era un espectáculo puesto en el cuerpo de la guapa sevillana, pero hubo un momento en el que se vio claramente cuál era el color fetiche de aquella joven promesa de la televisión y de las pasarelas. María José Suárez deslumbró cuando apareció enfundada en un vestido de noche blanco con el que parecía que en vez de pisar un escenario se acercase a un altar.
Y a partir de ese momento aquella imagen de la miss de blanco se coló en todas las quinielas y llegó con Miss Cantabria y Málaga con un puesto a la final. Un breve trámite que terminó cuando su antecesora María Reyes le puso la corona que convertiría a María José Suárez en Miss España 1996.
La ex miss muy emocionada recibió las felicitaciones de todos los presentes y aquella escena de alegría del pasado bien podría trasladarse ahora a a la fiesta del presente porque seguramente que de nuevo y de blanco María José haya brillado en su boda como lo hizo hace 22 años cuando la vimos por primera vez aparecer de blanco.