Chelo García-Cortés no es la única colaboradora de ‘Sálvame’ que ha tenido una aparatosa caída en el programa. Cinco años antes, Lydia Lozano sufrió un resbalón en directo durante una ‘batalla de agua’ y nos dejó a todos con el corazón en un puño. Recordamos aquel angustioso momento y las primeras palabras que dio la colaboradora al día siguiente del incidente.
Ironías de la vida, Chelo García-Cortés también tentó a la suerte aquel junio de 2014. La exconcursante de ‘Supervivientes’ y Lydia Lozano se enzarzaron en una batalla de botellas de agua contra Kiko Matamoros. Al principio, todo eran risas, y el colaborador perseguía a sus compañeras para empaparlas con el líquido incoloro.
El trágico momento llegó cuando Lydia, sin tacones y armada con una botella de agua, corrió detrás de Kiko para contraatacar, con la mala suerte de que el suelo estaba empapado y ella se resbaló. Se vivieron momentos angustiosos. La colaboradora no paraba de revolverse en el suelo y sus gritos advertían del sufrimiento que estaba sintiendo.
Jorge Javier quiso tranquilizar a la audiencia. “A Lydia se la han llevado a un centro médico”, dijo el presentador para calmar los ánimos. Kiko no podía evitar sentirse culpable y se mostró de lo más preocupado por su compañera: “Me duele mucho verla así”, dijo muy emocionado.
Al día siguiente del accidente, Lydia Lozano llamó al programa para contar cómo se encontraba. Explicó que tenía “una contusión en la cadera derecha, en el coxis y en la espalda” y, aunque no se había roto nada, no se podía ni mover. La colaboradora explicó que le habían hecho “una radiografía de todo” y alabó el trato que había recibido por parte de los médicos.
Matamoros había formado parte de aquella guerra de agua y quiso decirle unas palabras a la convaleciente colaboradora: “Me he alegrado muchísimo de que la cosa no sea grave (…) Estaba muy angustiado porque una caída así puede ser muy mala”.
Si quieres ver cómo se vivió aquel tenso momento hace cinco años, no dudes en dar al play al vídeo que encabeza esta noticia. ¡Vaya susto nos llevamos!