Adara Molinero es una de las concursantes más guerreras de la historia de nuestros reality shows y lo está volviendo a demostrar una vez más en ‘Supervivientes’, donde ya ha tenido algún que otro conflicto con los concursantes.
Las últimas discusiones las ha tenido con Katerina Safarova, a la que se enfrentó por lanzar troncos a muy poca distancia de ella, y con Manuel Cortés, con el que tuvo una gran disputa por culpa de una ración de arroz.
En ‘Unplugged’ queremos recordar que estas no son las únicas batallas televisivas de la ex de Gianmarco Onestini y que en el año 2016 protagonizó la primera de todas. Retrocedemos a aquel año para recordar su mítica discusión con Miguel Vilas en ‘GH 17’.
Corría el año 2016 cuando la ahora concursante de ‘Supervivientes’ y Pol Badía vivían su particular romance entre las cuatro paredes de la casa de Guadalix de la Sierra. Sin embargo, en esa relación de dos, había una tercera persona que preocupaba a Adara Molinero.
Ella tenía la mosca detrás de la oreja y, desde que entró al concurso, tenía la intuición de que Miguel Vilas se sentía atraído por su novio, algo que él negó por activa y por pasiva. No fue hasta unas semanas después del inicio del concurso cuando se descubrió el pastel.
El del peluquín y Pol Badía disfrutaron de unos días en el apartamento, una de las habitaciones de la casa de Guadalix de la Sierra. Fue allí donde Miguel Vilas se abrió en canal como nunca y le confesó a su amigo que se sentía atraído por él.
Aquella declaración de amor no tardó en llegar a oídos de Adara Molinero, ya que fue el propio Pol Badía el que se lo contó. Una información que a ella no le gustó nada y que le hizo montar la mundial en la casa más vigilada de España.
Nada más enterarse de la noticia, la que fuera novia de Rodri Fuertes se dirigió al jardín, el lugar en el que se encontraba Miguel Vilas, y allí estalló como nunca contra él, diciéndole prácticamente de todo.
“Eres un sinvergüenza de los pies a la cabeza. Mala persona. Me has estado volviendo loca todos los días, pensando que no te gustaba… Me has hecho llorar mucho ¿y ahora le dices que te gusta? ¡Sinvergüenza!”, gritó Adara, dejando a su rival con los ojos como platos.
Estaba alucinando con lo que acababa de ocurrir y lo único que se le ocurrió fue pedir su expulsión, movido por la presión: “No aguanto más, yo no vine a esto”, dijo Miguel Vilas, llorando a mares y al borde del colapso.
Después de aquel primer round, Adara Molinero volvió a verse las caras con él y regresó al jardín para terminar lo que había empezado: “Enferma de celos me llamabas… Sinvergüenza… Mirándome por los espejos”, declaró. Una discusión que tuvo lugar en 2016 y que, sin duda, ha pasado a la historia de los realities.