Gloria Camila fue superviviente: de sus conflictos, a la pedida de mano de Kiko Jiménez

‘Supervivientes’ no es algo nuevo para Gloria Camila. Tres años antes de dejarse la piel como defensora de Ana María Aldón y de protagonizar los rifirrafes más tensos con Sofía Suescun en los debates, la hija de Ortega Cano viajó a Honduras para participar, junto a Kiko Jiménez, en la edición del reality que se celebró en 2017.

Gloria Camila se lanzó del helicóptero el día 20 de abril de 2017 y dedicó su salto a su padre y a sus hermanos. Llegaba con ganas y aseguró que, aunque tenía carácter, ella solo lo sacaba cuando había que hacerlo.

Sus conflictos más sonados en Honduras

Lo cierto es que a la ahora defensora de Ana María Aldón la vimos encendida en varias ocasiones. Criticó a Leticia Sabater por acercarse a su novio, plantó cara a José Luis Sosa por el reparto de pescado y no dudó en enzarzarse con Iván González por un trozo de tarta desaparecido.

Fueron muchas las polémicas en las que se vio envuelta Gloria Camila. Pero, sin duda, hubo una que destacó sobre todas: la que protagonizó con Alba Carrillo y Lucía Pariente durante los primeros días de convivencia.

La que fuera concursante de ‘Supermodelo 2007’ afirmó que su padre “nunca” había “estado en la cárcel”, algo que hizo saltar como un resorte a la hija de Ortega Cano, que se enfrentó a ella y le dijo que para hablar de su padre tenía que lavarse “la boca”. Fue un duro momento y hasta Kiko Jiménez tuvo que intervenir para separarlas.

Su relación con Kiko, una montaña rusa

Pero Gloria Camila no concursó sola en la edición de 2017. Kiko Jiménez, su novio por aquel entonces, también fue participante y su relación fue muy cuestionada por muchos. Las constantes idas y venidas, sus discusiones y los ataques de celos hicieron que varios colaboradores de los programas de Telecinco aseguraran que tenían “una relación tóxica”.

Ambos protagonizaron muchos enfrentamientos, casi todos ellos por los celos del uno o del otro. En varias ocasiones, Kiko Jiménez llamó a su chica “boca chancla” o “bocazas” e incluso amenazó con dejar por llamarle “mentiroso”.

El día que fue expulsada del reality

Después de diez semanas en Honduras y de enfrentarse a cinco nominaciones, Gloria Camila tuvo que abandonar la Palapa tras exponerse a la decisión de la audiencia con José Luis Sosa. El público se decantó por el cocinero y decidió que la hija de Ortega Cano dejara de concursar.

Abandonó la Palapa, sí, pero aún no se había acabado su paso por el concurso. La tía de Rocío Flores tenía la oportunidad de continuar, solo si la audiencia prefería que se quedara ella antes que su novio, Kiko Jiménez, que llevaba varios días viviendo en la cabaña del árbol.

Al verse, los dos se llevaron una alegría tremenda. Se abrazaron y besaron, pero aquellas muestras de amor no hicieron inmune a Gloria Camila a la decisión del público. Así que, en cuanto Jorge Javier Vázquez dijo las palabras mágicas, ella tuvo que abandonar el concurso de inmediato y definitivamente.

Kiko hincó rodilla y ella le dijo 'Sí, quiero'

Aunque fuera expulsada en una nominación con su chico, aquella no fue la última vez que la pareja se vio en los Cayos Cochinos. Durante una semana, Kiko estuvo conviviendo con Oriana, que había ido a la casa del árbol en calidad de ‘fantasma del pasado’. Habían sido enemigos en ‘MyHyV’, pero en Honduras le dieron una segunda oportunidad a su amistad.

Aquella idílica convivencia se esfumó en cuanto Gloria Camila puso un pie en la casa del árbol para visitar a su chico. Le reprochó que se llevara tan bien con Oriana y ambos protagonizaron una discusión de lo más tensa, en la que Kiko Jiménez le terminó devolviendo algunos objetos personales que su novia le había dado.

Como de costumbre, aquella jornada también fue una montaña rusa y, aunque se enfadaron de nuevo por los celos, la pareja protagonizó un romántico momento. En la casa del árbol, Kiko Jiménez aprovechó los últimos instantes antes de que Gloria volviera a España para pedirle matrimonio.

Lo hizo en la casa del árbol y la respuesta de ella no se hizo esperar. Con una sonrisa de oreja a oreja respondió con un “Sí, quiero” al “Por favor, ¿quieres casarte conmigo?” de su chico. ¡Qué vueltas da la vida! ¿Hubiera pensado alguien hace tres años que su historia acabaría así?