Polonia es un país que está creciendo mucho en los últimos años a nivel futbolístico. Y quieren refrendarlo en la Eurocopa 2020. Un torneo en el que no están entre el grupo de favoritos, pero tienen los mimbres suficientes como para dar un disgusto a cualquiera y convertirse en una de las sensaciones del torneo.
Los polacos vienen de realizar su mejor actuación en un evento continental, alcanzando la ronda de Cuartos de Final. El objetivo no es otro que el de superar esa ronda y llegar a semifinales. Tienen a un goleador entre sus filas capaz de hacer creer en tal hazaña a todo un país.
Llegan al torneo tras clasificarse con bastante solvencia y holgura como primeros del Grupo G, en el que Austria, Macedonia y Eslovenia fueron sus principales adversarios. Ocho victorias, un empate y una derrota fueron su bagaje.
Entre las cifras obtenidas en la fase de clasificación, destaca un dato sobre los demás: solo cinco goles encajados. Polonia tiene en su zaga defensiva una de sus mayores fuerzas. Traspasar su última línea no es fácil, ya que son contundentes y prácticos con ello, además de saber juntarse y cerrarse según la situación lo requiera. Será un equipo muy difícil de batir.
Suelen jugar con un 4-2-3-1, asegurando movilidad y una zona defensiva segura, gracias a la aportación de los pivotes en el centro del campo, que suelen ser Zielinski y el exsevillista Krychowiak.
En ataque, la zona creativa suele ser responsabilidad de Szymanski, jugador clave en el Dinamo de Moscú y el centrocampista titular del Nápoles, uno de los equipos más importantes de la liga italiana.
Aunque en el resto del once puede haber variantes, de lo que no hay duda es que el gol es responsabilidad de Robert Lewandoski. El ariete del Bayer de Munich es uno de los mejores delanteros de los últimos tiempos. Prácticamente convierte en gol todo lo que toca.
Eso supone un valor añadido para un equipo como Polonia, que inicialmente no se va a caracterizar por generar muchas ocasiones. Pero gracias a Lewandoski, tienen la capacidad de, cuanto menos, crear mucho peligro cuando el balón le llega a su nueve, quien tiene talento de sobra para perforar la red en cada disparo.
De mantener la seriedad atrás y de generar ocasiones para que el killer de Polonia las enchufe se ocupará Jerzy Brzęczek y responsable de liderar los éxitos de Polonia desde el banquillo. Ostenta el cargo desde 2018 y ahora, con el equipo formado a su estilo, tiene una gran oportunidad de hacer historia para su país.
Polonia será, precisamente, uno de los rivales de España , ya que ambos están encuadrados en el Grupo E y, aparentemente, se disputarán el primer puesto del cuadro. Probablemente será el encuentro más importante de la primera fase para ambas selecciones, por lo que a buen seguro será muy trabajado técnicamente por las dos partes. Suecia es el otro rival, a falta de confirmar quién será el club que cierre el grupo tras clasificarse en las eliminatorias de repesca.