Los actuales campeones del mundo tendrán que demostrar que no fue fruto de un día, y la Eurocopa 2020 es una ocasión de oro para refrendar a Francia como una potencia mundial en la parcela futbolística.
Los galos se han clasificado sin demasiados problemas a la fase final de la Euro 2020. Era lo esperado, tanto por calidad, como porque tampoco tuvieron que hacer frente a un grupo demasiado complicado: Turquía, Islandia, Albania, Andorra y Moldavia. Su única derrota fue ante el equipo otomano, que accedió al torneo como segundo de grupo.
Es evidente que la selección francesa no está jugando a un nivel tan sublime como en 2018, hecho que les llevó a hacerse con el campeonato del Mundo. Pero el talento, lo tienen de sobra. Lejos ha quedado la etapa de transición y la polémica al respecto de las no convocatorias de Karim Benzema. El delantero blanco regresa para la Eurocopa tras firmar un gran año en su club, atrás quedan los vetos.
Francia tiene uno de los mejores ataques del mundo. Antoine Griezmann es capaz de resolver cualquier partido en una acción aislada. Aunque este año no esté rindiendo a su mejor nivel en el F.C Barcelona, lo cierto es que con Francia se desmelena. Tiene en su mano el convertirse en el máximo goleador de la historia de la Eurocopa. En la edición de 2016 anotó seis goles en siete partidos. Con tres goles más igualaría a Platini, máximo goleador histórico del evento.
Además, junto a él estará Kylian Mbappé, uno de los futuros candidatos a llevarse el Balón de Oro. Un futbolista potente, único y especial. Es capaz de dejar a cualquier defensor atrás en un momento. Y, ante la portería, no duda.
Su once tipo es un 4-2-3-1 con el que desplegar todo su potencial ofensivo y, especialmente, la velocidad de sus atacantes. Los mencionados Mbappé y Griezmann están escoltados por jugadores del calibre de Pogba, Rabiot, Tolisso y, sobre todo, Ngolo Kanté barriendo todos los balones para que nadie se acerque al área.
La defensa francesa está más que experimentada y con sangre muy joven que ya promete. Varane es un fijo aunque llegará tras lesión y sin apenas rodaje. Koundé, Lenglet o Kimpembe, también pueden actuar en esa posición.
Los galos estarán exigidos desde el primer momento, lo que puede desencadenar un disgusto. Forman parte del Grupo F, que bien podría denominarse como el Grupo de la Muerte, ya que en él se encuentran Alemania, siempre imponente en estos torneos; y Portugal, actual campeona de Europa y con Cristiano Ronaldo en sus filas. El tercer rival es Hungría que en principio es el más débil del grupo, aunque en este tipo de campeonatos no se puede dar nada por hecho.
Didier Deschamps, el seleccionador de Francia, tendrá que trabajar duro en concienciar a sus pupilos que, pese a su indudable calidad, no será un europeo nada sencillo. Su labor será también la de manejar el carácter de algunas de sus estrellas. Ya hemos visto que Mbappé ha tenido varias disputas con el entrenador del PSG. Los egos pueden ser muy peligrosos en el mundo del fútbol.
Francia tiene talento de sobra para vencer el campeonato de Europa, que esta vez nos llevará por doce sedes repartidas por toda Europa. Tendrán que cambiar alguna que otra tecla para que sus rivales, quienes les tendrán más ganas debido a su condición de campeones del mundo, no sepan por dónde pueden salir.