Italia está en cuartos de final de la Eurocopa tras vencer a Austria en la prórroga. Chiesa se erigió héroe y marcó el tanto que abría el marcador. Pessina marcó el segundo y Kalajdzic puso mordiente a los minutos finales. Los italianos, candidatos a ganar el torneo, se enfrentarán al ganador del Bélgica-Portugal.
El partido comenzó con Austria muy adelantada. El conjunto alpino le jugó de tú a tú a Italia y llevó la manija de la posesión. Sin embargo, los italianos, pese a tener menos la posesión, tuvieron las opciones más claras. La primera fue para Barella, pero un paradón de portero de balonmano de Bachmann evitó la apertura del marcador.
La otra más clara del primer tiempo también hubo que apuntársela a los de Mancini. En los últimos compases del primer tiempo, Immobile armaba la pierna y se sacaba un fuerte disparo que golpeaba la cruceta. Manos a la cabeza y es que el delantero de la Lazio había podido marcar uno de los goles más bellos de esta Eurocopa. 0-0 en el marcador y equipos a vestuarios.
Tras la vuelta del descanso, la tónica del partido no cambió demasiado. Dos equipos valientes, que se trataban de tú a tú y que atacaban igual que defendían, con todo. En la segunda parte, Austria fue mejor. La más clara fue para Arnautovic, pero su gol lo anuló el VAR por fuera de juego.
Italia estaba contra la lona y Mancini introdujo cambios para intentar el gol de la victoria sin la necesidad de ir a la prórroga. En los minutos finales del tiempo reglamentario, ambos tuvieron ocasiones para adelantarse en el marcador, pero les faltó mejor definición de cara a la portería. Pitido final, empate en el marcador y el partido que se marchaba a la prórroga.
En el tiempo extra, Italia iba a golpear primero. Minuto 95, balón que recibía Chiesa dentro del área, la paraba con el pecho, la bajaba y fusilaba a Bachmann para adelantar a los italianos en el marcador. Celebración llena de rabia e Italia que empezaba a adormecer el partido.
Austria subió las líneas e Italia dispuso de varias ocasiones para ampliar el marcador pero fue Pessina quien iba a marcar el gol de la tranquilidad. El futbolista, que había salido como hombre de refresco en los minutos finales, ponía el 2-0 en el marcador. Todavía iba a haber tiempo para las emociones fuertes y es que Kalajdzic recortó distancias a cinco minutos para el final. Pase a cuartos para Italia y Austria, que se despide tras haber hecho un gran torneo.