Francia se complicó el liderato del grupo F tras empatar contra Hungría (1-1) en la segunda jornada de la fase de grupos. La victoria ante Alemania en el estreno se vio empañada por la falta de acierto en los metros finales ante los húngaros. La selección de Deschamps tiene cuatro puntos y estará en octavos de final, pero este empate le puede hacer tener un cruce más difícil. Aún hay tiempo para reaccionar en la última jornada ante Portugal.
Deschamps no quiso relajarse ante Hungría y volvió a contar con los titulares, salvo un cambio en el lateral izquierdo, Digne por Lucas Hernández. Los tres puntos daban la clasificación matemática a la selección ‘bleu’ y ese era el objetivo. Mbappé, Benzema y Griezmann repitieron en ataque y su pegada fue demasiado para los húngaros en Budapest.
Hungría salió con mucho entusiasmo y planteando un partido muy físico. A partir del minuto 10, Francia se asentó sobre el césped y Griezmann estuvo a punto de marcar tras una conexión entre Mbappé y Benzema. No se les acabó la gasolina, pero dieron un paso atrás y el control pasó a estar en el centro del campo con Kante, Pogba y Rabiot.
Szalai dio el susto pasados los primeros 20 minutos de partido al tumbarse en el suelo y no poder levantarse. El delantero tuvo que ser atendido y dejó el partido mareado, con un golpe en la cabeza. Con varias interrupciones, Francia se desconectó y perdió el ritmo del encuentro hasta Mbappé y Benzema se volvieron a asomar al área. El delantero del PSG se la dejó de espuela al jugador del Madrid en el punto, y su disparo se marchó rozando el poste. La ocasión más clara de la primera parte y la afición francesa disfrutando de la sociedad Mbappé - Benzema.
Francia estaba siendo mucho mejor, tenía encerrada a Hungría, pero en el fútbol lo que importa es el gol. Y eso lo hizo Hungría al filo del descanso. Fiola enganchó una contra y se coló hasta el punto de penalti para superar a Lloris por el palo corto. Al portero del Tottenham se le ‘olvidó’ salir y le dejó mucho hueco al húngaro que no perdonó en el mano a mano. Fiola se volvió loco en la celebración y aporreó la mesa de una periodista ante el júbilo de un estadio eufórico tras el tanto.
Deschamps y los jugadores franceses se fueron con el susto en el cuerpo al descanso y con la necesidad de remontar para que la última jornada no fuera un todo o nada contra Portugal. A Francia le valía con meter las ocasiones que había tenido en la primera parte, pero se tenían que poner serios.
Y lo hicieron, aunque no fue fácil. Mbappé volvió a ser decisivo en el empate de Francia. Lloris sacó muy rápido en largo y el delantero del PSG ganó la carrera a la defensa húngara. Mbappé se hizo hueco y su centro quedó muerto en el punto de penalti tras un rechace para que Griezmann fusilara a placer y pusiese el 1-1.
Francia lo intentó hasta el final pero no hubo manera de que llegara el segundo gol. El equipo francés se queda con cuatro puntos, con el tercer puesto como mínimo en el bolsillo, aunque tendrá que ir con todo contra Portugal en la última jornada para intentar tener un cruce lo más asequible posible en los octavos de final.