Un exfutbolista profesional sorprende al reconvertirse en mago tras una lesión de rodilla: "Tuve que reinventarme"
Jano Velasco fue futbolista profesional y ahora se dedica a la magia
Este futbolista ha jugado en el Fuenlabrada y en la primera división en Austria
Todas las actuaciones de la penúltima noche de audiciones en 'Got talent España'
“Nunca es tarde para reinventarse”, confiesa Jano Velasco al presentarse ante el jurado de ‘Got Talent España’. Y es que este participante se dedicaba hace unos años al fútbol profesional y tuvo que retirarse del deporte a causa de una lesión de rodilla. Ahora se dedica a hacer espectáculos de magia.
“Mi vida, a raíz de la lesión en el fútbol, ha cambiado 180 grados, brutal. Tuve una lesión, la verdad, bastante grave en el cartílago. Me operé tres veces, lo intenté después de cada operación hasta que decidí que era imposible. Tuve que dejar el fútbol y buscar cómo reaventarme. Fue la época más difícil que he tenido en mi vida”, confiesa antes de subir al escenario de las novenas audiciones de ‘Got Talent’.
La actuación de Jano Magic en ‘Got Talent’
Fue entonces cuando Jano decidió dedicarse a la magia al 100%: “Soy un mago con un as bajo las botas”. Dicho esto, comienza el show de magia de Jano, que tiene que ver con los autógrafos de los miembros del jurado y con cartas de la baraja. ¿Será suficiente para sorprender a Risto, Flo y compañía?
La valoración del jurado para Jano Magic
“Para llevar dos años, me parece que lo has bordado”, han sido las palabras de Paula Echevarría durante su valoración. Mientras tanto, Florentino Fernández se ha interesado por el pasado futbolístico de Jano (él cuenta que, en España, ha jugado en el Fuenlabrada, pero que en Viena ha formado parte de un equipo de primera división).
“Me emociona tu historia porque mi tío Julio (Iglesias) también tuvo que cambiar de carrera. Lo que, al principio, puede parecer una piedra en el camino, ojalá pueda ser algo que te abra muchas puertas y que te traiga mucho éxito”, ha dicho, por su parte, Tamara Falcó. Risto Mejide considera que el truco está bien, pero “tampoco es para flipar”.
