La guardia civil ha detenido al joven de 20 años como presunto autor del asesinato de un niño de 11 años en Mocejón (Toledo). Mateo fue apuñalado por un hombre y en 'TardeAR' hablamos con Alberto, testigo del momento en que ha sido detenido el presunto asesino, y su testimonio podría dar un giro a la historia.

"El niño agredido era una víctima que se quedó atrás, parece ser que iba a por un vecino de enfrente y Mateo desgraciadamente se quedó atrás y fue víctima", relataba Alberto y añadía que había habido otros intentos de agresión: "Dicen que ya ha subido varias veces porque estos chiquillos frecuentaban subir allí, pero al haber adultos… Este domingo eran las fiestas del pueblo de al lado y había menos gente".

Es más, Alberto relataba que antes de su detención, podría haber sucedido algo más: "Parece ser que esta mañana ha intentado otra vez presuntamente ir a por él". Sin embargo, todo se habría interrumpido porque la guardia civil ha acudido al lugar: "Tras un registro, ha acabado detenido".

En cuanto a su actitud, parecía "tranquilo" aunque no puede asegurarlo porque estaba lejos: "No lo he visto nervioso, no tenía una actitud muy agresiva".

"Ha salido con los grilletes y se ha montado con el padre y se los han llevado a los dos", explicaba Alberto, que asegura haberlo visto todo. Una vecina del joven detenido apuntaba minutos antes que no se trataba de una persona conflictiva y el testigo replicaba: "Se está hablando que tenía problemas, yo lo conozco de vista, si es un problema de salud mental, cuadra porque no es normal lo que ha hecho".

Andrés estaba a cien metros de lugar donde todo ocurrió. Cuenta que fue una de las primeras personas en llegar a su lado, pero que el primero fue el propio primo de Mateo: "Hubo otro chico que fue el que me asustó porque venía despavorido".

Cuando llegaron a él, empezaron con las maniobras de reanimación, que continuaron hasta que llegaron los servicios de emergencia: "No tuvo eficacia la reanimación, estaba ya en parada cardiaca (...) Hicimos todo lo que pudimos, la pena es que no hemos podido hacer más por él".

También ha hablado una tía abuela del pequeño, que aún no lograba digerir lo sucedido: "Ha sido muy triste para la familia", confesaba Carmen y añadía que esto afectará a toda la localidad: "Ya los niños no van a tener la libertad que tenían, los padres, los abuelos vamos a estar en vilo cuando un niño salga a la calle".

"Estamos mal porque ha sido muy fuerte, esto no lo asimilas, que te pase algo así... y las conoce todo el pueblo", confesaba ante las cámaras.