En 'TardeAR', un empleado hace un llamamiento. Se trata de un hombre que quiere proteger su identidad mostrando la espalda a la cámara y que se hace llamar Paco. Denuncia que fue a reclamar un dinero a su jefe pero que él, a modo de respuesta, le roció con pegamento arrojándoselo desde una ventana.
Se trata de una sustancia corrosiva, un pegamento que se utiliza en la construcción para pegar el hormigón y Paco nos mostraba en directo cómo ha quedado su espalda, aún con lesiones y con restos de pegamento, como le sucede en otras partes de su cuerpo.
La policía le recomendó acudir a un centro de salud pero allí le derivaron al hospital, donde intentaron quitarle los restos de pegamento durante cuatro horas, sin éxito. "Me lo puedo quitar, pero me arranco la piel", comentaba Paco, que mostraba cómo hasta las gafas de sol se le quedaron pegadas a la camiseta. Es más, ha tardado algún tiempo en eliminar el pegamento de su cabeza, ya que le tuvieron que quitar gran parte del pegamento hasta que le pudieron rapar.
"Estoy bien, con algo de ansiedad", relataba el hombre, que aún piensa lo que podría haberle pasado: "Si llego a mirar para arriba me hubiera dejado ciego".
Además, reiteraba que tan solo fue a cobrar su dinero como trabajador. Previamente se lo había reclamado, pero no consiguió nada y hasta le bloquearon telefónicamente.
Al parecer, no es el único empleado con el que este hombre ha tenido problemas. Paco nos cuenta que sabe de gente a la que le "debe dinero" y la reportera Laura Susín añadía que hay otros empleados que relatan "episodios complicados".
Sin embargo, 'TardeAR' ha logrado hablar con él y le resta importancia a lo sucedido: "Está comprobado que no es corrosivo ni es nada, es de unión". Según su relato, solo es una sustancia que se quita "fácil" y que no quema la piel.
Es más, acababa diciendo al equipo: "Os estáis equivocando".