Anabel Pantoja se enfada y acaba llorando en Hollywood: "Esto no está en mi contrato"
Anabel Pantoja se echaba a llorar cuando le proponían un reto que implicaba una caminata de más de dos horas hasta llegar al célebre cartel de Hollywood
"No voy a morir con una serpiente aquí", se quejaba Anabel Pantoja
El divertido enfado de Anabel Pantoja al tener que caminar hasta la puerta del Coachella: "5 kilómetros ahora, podrían haber puesto un tranvía"
Hemos visto a Anabel Pantoja un poco enfadada, hablando a escondidas con su novio... pero nunca la habíamos visto tan agobiada. "No me pagan para esto, no puedo más", decía Anabel Pantoja durante la grabación de su sección en 'TardeAR'. Y es que parecía disgustada con lo que tenía que hacer, dejaba claro que no quiere ser "actriz" y se plantaba: "Que no, que no, esto no es vida, hasta aquí".
Anabel Pantoja quiere conquistar Hollywood y se ha ido a visitar las casas de los famosos. La colaboradora ha alucinado con las mansiones y hasta ha llorado cuando, por sorpresa, se ha visto en la casa en la que Michael Jackson pasó sus últimos días de vida: "Me da mucha pena", decía.
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El enfado de Anabel Pantoja
Pero lo peor estaba por llegar y es que el equipo del programa le pedía que se pusiera ropa deportiva para enfrentarse a un reto: una camina de más de dos horas hasta conquistar el célebre cartel de Hollywood.
A la influencer no le gustaba nada, de hecho, se negaba: "Yo lo intento pero tío, es que tengo ganas ahora mismo de llorar". Con el paso de los minutos, su enfado iba a más y es que le explicaban que en el camino podría encontrar animales inesperados: "Hay serpientes ¿Yoooo? No, mi vida, tengo que darle mucho a esta vida, no voy a morir con una serpiente aquí".
Finalmente, con un poco de sandía y de melón, la colaboradora accedía a intentarlo al menos. Sin embargo, cuando llevaba 15 minutos de caminata, decidía parar. En ese momento, le anunciaban que tenía que bajar caminando porque el coche no podía llegar hasta ese lugar a recogerla y ella se echaba a llorar: "No puedo más, no está puesto en el contrato, no quiero ser actriz, quiero ser influencer", se quejaba Anabel y, por fin, conseguía que la recogieran.