Una mujer acusada por sus vecinos de practicar la prostitución en su comunidad da un manotazo al reportero Álex Álvarez: "Me ha dado bien"
Los vecinos de Borriana han creado una canal en las redes sociales para ahuyentar a los hombres que acuden al piso
Uno de los vecinos, David Morales, apunta que la guardia civil le deriva a la policía local y ellos, a su vez, a la guardia civil
Una de las mujeres da un manotazo al reportero Álex Álvarez: "Igual no se aprecia mucho pero a mí me duele la mano, me ha dado y bien"
Muchos hombres, hasta 40, acuden a diario a uno de los pisos de una comunidad de Borriana para desesperación de sus vecinos. David Morales es uno de ellos y nos cuenta en directo en 'TardeAR' que alguien ha decidido abrir un canal y publicar las imágenes de quienes acuden para así disuadirles, pero no han conseguido su objetivo...
Las grabaciones de los infieles han tenido miles de visualizaciones y han generado un gran revuelo en este pueblo localizado en la Comunidad Valenciana. Las cámaras se instalaron con otro motivo pero, tras descubrir que sus vecinas estarían presuntamente practicando la prostitución, han decidido subir las imágenes a la red para que los clientes no vuelvan: "Ha sido más que nada para poder defendernos".
Y es que han intentado denunciar, pero la guardia civil les remite a la policía local y ellos a su vez a la guarda civil, con lo que David ha presentado una queja en el ayuntamiento.
Hay menores que presencian a diario lo que está ocurriendo y David se quejaba en directo en 'TardeAR': "Me di cuenta en noviembre cuando vi un trafico de personas que no era normal pero de pronto yo estaba en mi dormitorio y empiezo a escuchar en el pasillo relaciones, tarifas, cuánto les cobra, los servicios que ofrecen y demás".
"Era insoportable", comentaba y explicaba que por eso decidieron abrir un canal y emitir las imágenes, sin embargo, cuenta que un encapuchado llegó para arrancar la cámara aunque él lo identifica como una persona que hace le mantenimiento del piso en el que todo sucedería.
El reportero Álex Álvarez ha hablado con una de las mujeres acusadas, que sin embargo se negaba a hablar y se mostraba agresiva con el reportero: "¡Respeta!", gritaba y daba un manotazo en el micrófono al periodista: "Igual no se aprecia mucho pero a mí me duele la mano, me ha dado y bien", decía.