Los policías acusados por entrar en una vivienda durante la pandemia utilizando un ariete han sido absueltos. Los policías intervinieron tras pedir en 28 ocasiones durante 45 minutos que abrieran la puerta y, ante la negativa de quienes estaban en el interior, entraron utilizando esta herramienta. Ahora nos cuentan en ‘TardeAR’ cómo han vivido este tiempo.
Daniel García es subinspector de policía y nos confiesa que han sido tres años “muy duros” porque se han sentido “lapidados” a raíz de la emisión de un vídeo de un minuto o dos que no mostraba la realidad.
Y es que asegura que los vecinos vivieron un infierno y que la situación “requería una actuación por parte de la policía”: “Nosotros somos el tipo de policías que no vamos a darnos la vuelta”. Eso sí, matizan que siempre van “con la ley en la mano” y reiteraba: “Hicimos lo que consideramos que teníamos que hacer y la justicia lo ha avalado”.
Y es que su intervención se grabó al completo y es lo que han mostrado en el tribunal: “Los vídeos nuestros llevan guardados en un cajón cerca de dos años y medio. Dos horas de grabaciones, se ha visto en el juicio y ha sido contundente porque se ve la legalidad de la actuación”.
“En pandemia la actuación fue laxa, nosotros antes que policías somos personas, nos pusimos en la piel de los ciudadanos”, decía Daniel García y el agente Ernesto Gaspar explicaba que en este caso acudieron por la llamada de los vecinos pero que justo antes vivieron una situación similar pero con un resultado diferente: abrieron la puerta, se identificaron, se disculparon y explicaron que llevaban mucho tiempo sin verse.