Los supervivientes han logrado tener eso que tanto ansiaban y que es de lo más importante en el concurso: ¡el fuego! Después de días y días intentándolo, han sido Olga Moreno y Gianmarco los habitantes de la isla del Pirata Morgan los que conseguían la proeza.
Con una base de madera, un palo, un coco y un arco, los supervivientes se esforzaban como nunca en la fricción de la madera hasta que lograban un pequeño humo que convirtieron en llama después. El resto de sus compañeros se sumaron a la tarea y entre todos vieron cómo la hoguera que habían preparado prendía. Con el resultado, todos estallaban en júbilo.
Olga y Gianmarco se fundieron en un abrazo. Ella tenía muy claro en quiénes estaba pensando en ese momento. "¡Se lo dedico a mis niños!", dijo mirando al cielo.
En el barco de los encallados, el Pirata Morgan brindaba a Alexia y Sylvia la posibilidad de elegir entre comida o un pebetero que bien utilizado podría suponer el fuego. Sin embargo el pebetero era de cemento y les costó muchísimo transportarlo hasta el barco. La misión pintaba que iba a fracasar.
¡Pero sacaron fuerza e ingenio y lo lograron! Más tarde, Palito Dominguín daba con la clave para hacer fuego.