Tras ser expulsado el pasado jueves por la audiencia de 'Supervivientes 2022', Rubén Sánchez Montesinos ha regresado a la civilización y a las comodidades que esta supone.
Tras disfrutar de un rico desayuno junto a una figura a tamaño real de su chico, Enrique del Pozo, en el que ha dejado claro que se siente muy orgulloso de su paso por el reality, ha llegado el momento más deseado por prácticamente todos los supervivientes: darse una ducha.
Al ver el agua corriente en la ducha, Rubén Sánchez Montesinos ha expresando su alegría: "Agua calentita y dulce. Madre mía... es agradable y fortificante", ha dicho mientras comenzaba a darse su primera ducha tras ser expulsado.
"Champú después de tres semanas y media como superviviente... No me lo creo. Es una maravilla", ha dicho el concursante mientras se enjabonaba el pelo.