Paola Caruso, última expulsada de ‘Supervivientes 2017’, ya está viajando para España y ha podido de su primer desayuno, una gran tarta de chocolate que ha saboreado intensamente. Además, la italiana ha hablado de sus compañeros, de lo peor, lo mejor y ha dejado claro que ninguno de los supervivientes se merece ganar el concurso.