Olga Moreno ha demostrado cuánto le importa Gianmarco Onestini. La superviviente se siente muy unida a él desde el comienzo del concurso. Su amistad ha ido creciendo conforme han pasado las semanas, así que Olga quería hacerle un regalo al italiano: una pulsera de la amistad para que su relación dure para siempre.
La superviviente se acercó a su compañero con una cuerda para construir delante de él las dos pulseras que simbolizarían su unión. "Espero que lo que hemos sembrado aquí que lo veamos fuera y que vengas a verme a Málaga y que nosotros podamos ir a Italia", le dijo. A Gianmarco le pareció un gesto tan bonito que no paró de sonreír y de abrazarla.
Juntos comenzaron a hacer tres nudos en cada pulsera. "¿Por qué son tres?", se cuestionaba Gianmarco. "Esto es para apretar la amistad y no se rompa nunca. Son los tres nudos de la fuerza. Pueden ser de amistad, de amor, de dinero, de lo que sea pero siempre con mucha fuerza", le explicó ella.
En esta escena resultó que había alguien más: Valeria. "Esa cuerda era mía, yo también quiero una pulsera", señalaba. Pero Olga le dijo que eso era una cosa de Gianmarco y ella.
Como a Valeria no le gustó que la dejasen de lado, casualmente después ella también fabricó un amuleto, pero se lo regaló a Tom Brusse. "Si vienes a Italia ahora tienes una hermana rubia. Tú me puedes llamar Valery. Te quiero mucho y quiero que te quedes", dijo delante de todos.