Elena recordaba que estaba siendo el primer cumpleaños de su nieto, el hijo de Hugo y Adara, y sufría su primer bajón en Honduras. José Antonio Avilés le aconsejaba que se desahogase con Hugo precisamente por tener a esa personita en común.
Ella en un principio no quería, pero cuando llegó la noche José Antonio la convenció para ir al santuario, donde estaba Hugo, para que hablasen.
Hugo le confesaba a Elena el motivo por el que no se había acercado a ella antes. "Te pareces a tu hija. Es como que quiero hablar pero mejor no porque huyo de la situación. Cierro los ojos, oigo tu voz y la veo a ella", le decía.
"A ver si en esta experiencia conozco más al padre de mi nieto", le propuso ella.
Ante sus palabras, Hugo se venía aún más abajo: "No me había despegado del niño más de dos días y en Madrid, que sé que estoy a una hora de mi casa. Él no se da cuenta pero yo sí", le decía. Elena, a pesar de todas las diferencias que ha tenido con él, le echaba un cable: "Si me necesitas, cambiaré la voz", le respondía antes de darle un abrazo.
En el plató de 'Supervivientes: Conexión Honduras' se encontraba Adara, muy atenta a las imágenes del padre de su hijo y de su madre. Por un lado, a Adara le gusta el acercamiento. Sin embargo no confía en que se mantenga durante el concurso.
En su reencuentro en la primera gala de 'Supervivientes 2020', Elena y Hugo firmaron la paz al comenzar el concurso. Eso sí, Elena marcó distancias con él cuando el uruguayo le llamó "suegra".
Ambos coincidieron en que tenían que dejar sus rencillas en España por una buena convivencia y para disfrutar al máximo de la experiencia.