Lo de Elena y Avilés parece insalvable. Los que fueran amigos en su momento ahora están más distanciados que nunca y no pueden ni verse. La última discusión que han tenido comenzaba por Ferre.
Elena defendía que la expulsión de Ferre por ser un gran superviviente y atacaba a Avilés por haber sido uno de los salvados. "Que salven al tramposo número uno de la edición, pues será lo que le gusta a España", decía.
Pero la respuesta de Avilés iba a gustarle menos: "Igual que en su día le gustaban otras cosas, como alguien vendiendo unos cuernos", respondía aludiendo a Adara. Elena no podía contener el llanto. "A mi niña no la menciones", decía totalmente rota. Avilés no se calló.
"Esta semana vas cuidar el fuego y tú no vas a comer de mi pescado. Tú no comes de mi comida por mencionar a mi hija. Me enfado por las mentiras y porque un superviviente como Ferre se ha ido, me hiere dentro. No le llegas a la suela de los zapatos. Tengo mucha familia de abogados para hundirte. Tú sigue hablando", estallaba Elena. "Nadie te cree. Destrozas el periodismo del corazón. Gente como tú la destroza", añadía.
Por su parte, Avilés se justificaba diciendo que Adara "es un personaje que ha vendido sus miserias" y que por ello tenía el derecho de mencionarla. Además la acusaba de ser "una embustera" que hace 'teatro'.
En el plató, Adara defendía a su madre argumentando que Avilés "no para de machacar" a su madre. "No para este chico. Es continuo el machaque. Se ve la clase de persona que es. La ve llorar y no es capaz de parar. Este chico vive en una realidad paralela y lo único que hace es manipular y mentir", sentenciaba.