El juego de recompensa de este domingo exigía un esfuerzo físico muy elevado. ¿El nombre de la prueba? 'El triángulo sin bermudas'. ¿Y la ansiada recompensa? Un merecido desayuno compuesto por café y tostadas para la ganadora. Ana María, Yiya e Ivana, habitantes femeninas de Playa Desvalida, se han batido en un reñido duelo a tres bandas en el que tenían que alcanzar unos objetos situados alrededor de un círculo que había dibujado sobre la arena. El problema es que estaban atadas.
Pero lo más llamativo de este juego han sido los gritos de dolor de Ana María durante la prueba. Lara le ha preguntado en varias ocasiones que si se encontraba bien porque, de lo contrario, el juego se detendría de inmediato. La concursante se ha negado, quería luchar por esa recompensa, pero sus gritos no cesaban.
Al finalizar la prueba, Ana María ha roto a llorar y pedía a gritos que dejaran de tirar de la cuerda (aunque en realidad ya nadie la estaba tensando). El doctor la ha atendido en el momento y ha comprobado que la participante se encontraba perfectamente. Es más, todas las penas se le han ido pronto porque... ¡Ha resultado ser la ganadora del juego!
Los chicos no se han quedado atrás. Después de presenciar la victoria de Ana María, ha llegado el turno de los habitantes masculinos de 'Playa Desvalida'. Hugo, Nyno y Pavón se han enfrentado al mismo juego y Hugo ha sido quien más competencia le ha hecho a Ana María en eso de los gritos. El esfuerzo les ha hecho poner su cuerpo al límite y finalmente Nyno ha sido quien se ha ganado el delicioso premio.
En el equipo de los mortales, Rocío, Elena y Fani han disputado la prueba como auténticas luchadoras. Rocío fue la que más ventaja cogió al principio, por eso Elena y Fani fueron las primeras en usar la estrategia del dos contra uno.
Sin embargo, los minutos pasaban y no consiguieron hacer retroceder a Rocío. Así que Fani quiso intentarlo y Elena pasó a ayudar a Rocío, sabiendo que ella no conseguiría ya la recompensa.
La prueba de los chicos mortales también han estado muy reñidas. Los primeros en batirse en duelo fueron Jorge y Avilés. Avilés no se lo puso nada fácil a Jorge quien, aún clavando los pies en la arena no conseguía avanzar mucho.
Sin embargo, Avilés finalmente pedía que se parase la prueba ante el dolor por el arnés. Al ponerse Lara a su lado preguntándole si estaba bien, Avilés sufría un ataque de nervios por el agobio.
Igual de dura ha sido la batalla entre Ferre y Barranco. Al contrario que sus compañeros, los supervivientes no se alejaban y tiraban el uno del otro, sino que mantenían la tensión a centímetros del otro.
Barranco y Ferre, además, han tenido unos días muy complicados. Su relación ha cambiado radicalmente desde que Barranco nominase como líder a Ferre. Un liderazgo que consiguió en la prueba de apnea, donde Ferre quedó segundo.
En esta ocasión, fue Ferre el ganador de la prueba. Barranco sufría un mareo que le obligó a parar el juego.