Laura Matamoros afrontaba una gala de 'Supervivientes' totalmente diferente al resto. Jorge Javier Vázquez le iba a informar si podría o no continuar después de la fuerte lesión de espalda recogiendo leña que tuvo en Honduras. Una lesión por la que tuvo que ser evacuada de inmediato y que le ha tenido en vilo hasta entonces. En esta gala saldría de dudas sobre si podía regresar a la convivencia y, además, conocería la decisión del público sobre su nominación.
Este miércoles, Carlos Sobera le daba la última hora a la concursante, quedando descartado cualquier tipo de fractura y no pudiendo decírselo a Laura durante la gala de 'Supervivientes: Tierra de Nadie' ya que todavía se seguían realizando pruebas para saber el alcance de la lesión.
Tras unos días, Jorge Javier Vázquez comunicaba a Laura Matamoros que podía seguir en 'Supervivientes'. Antes de que el presentador leyera el parte médico, Laura rompía a llorar junto a su peluche: "Ha sido muy duro. Ha sido una semana muy complicada, no saber nada, estar aquí sin saber si podré seguir o no... y sobre todo lo que me ha pasado, sin saber nada de mi familia... pero bueno, estamos". Tras estas palabras, el presentador sacaba de dudas a todo el mundo y sobre todo, a Laura Matamoros.
"Laura Matamoros ha respondido satisfactoriamente al tratamiento, lo que permite su reincorporación a la playa. Deberá continuar en tratamiento y no realizará pruebas que exijan esfuerzos físicos hasta su completa recuperación", anunciaba el presentador de Telecinco. Tras esta gran noticia, Jorge Javier le recordaba que estaba nominada y que se jugaba la expulsión junto a Miri y Kiko. Pero las noticias para ella no acababan aquí: "Vas a tener que enfrentarte a ellos en un cara a cara sin precedentes y en un lugar inédito y especial".
Laura Matamoros, Kiko y Miri se enfrentaban cara a cara entre ellos en el Ágora de Poseidón para arreglar todas las cuentas pendientes que tenían entre ellos. Kiko empezaba fuerte asegurando que el tono de voz de Laura le había chirriado en Honduras más de una vez. Esto hacía saltar a Laura Matamoros rápidamente: "Estoy ya muy cansada de que siempre le de un voto de confianza y que acabe dándomela".
Tras esto, Laura le decía a Kiko que "hay que tener la lengua muy larga y la mente muy corta para decir lo que dijo junto a Marieta". La concursante procedía a subirse la camiseta y enseñar cómo tenía la espalda. Kiko le achacaba ser demagoga.
Por último, Kiko confesaba que no era "el mejor momento" de Laura para volver a 'Supervivientes': "No has tenido una amiga para que te diga que te relajes". Finalmente, ambos se daban un emotivo abrazo y dejaban todo de lado: "Quiéreme bien. Te quiero como si fueras mi hermano", confesaba Laura entre lágrimas.
Momentos más tarde, los tres nominados conocían la primera decisión de la audiencia sobre la nominación semanal: salvar a Miri Pérez-Cabrero de la expulsión. Eso dejó a Laura y a Kiko con caras de plenas circunstancias, siendo Laura la que manifestaba que le parecía injusto que para alguno de los dos el concurso fuese a terminar.
En la Palapa, finalmente los concursantes descubrían que la expulsada de la semana era Laura Matamoros. "Estoy muy orgullosa de haber podido venir, a pesar de la semana tan mala que he tenido. Gracias a todos por haberme apoyado el tiempo que he estado. Lo he disfrutado muchísimo. Gracias al equipo por haberme dado un espacio con Kiko en Limbo y a los demás, disfrutad de la experiencia", reaccionaba antes de que su concurso se terminase. Kiko se quedó desolado.
Finalmente, Laura se despedía de su etapa en 'Supervivientes' en un sitio muy especial para ella: Playa Limbo. "Siento sobre todo, nostalgia de que ya no voy a volver más. Limbo fue muy bonito para mí y Cayo Paloma también. Es lo mejor que me llevo de aquí", comentaba una Laura muy emocionada. Y es que para ella el concurso había significado "una superación, al pensar que no podía estar sola".
"Me he superado a mí misma en muchos aspectos de mi vida, aunque todavía me queda mucho por pulir. Seguramente se hayan curado muchas heridas... aunque vete tú a saber. Me las guardo para mí. Estar sola es el miedo que tenía de verdad. Aquí, en ese sentido, me he superado. Y a olvidar el pasado (en un cierto modo)", aseguraba Laura Matamoros, con los ojos llorosos.