El otro día ocurrió algo en Playa Limbo que nadie se esperaba. Y es que Laura Matamoros salió expulsada frente a Arantxa del Sol y Kiko Jiménez después de que Blanca Manchón se salvase tras conseguir vencer en la prueba de líder. Pues bien, su marcha no resultó nada fácil ni para Arantxa ni para Kiko Jiménez, quien se daba un sólido abrazo con ella antes de irse definitivamente y lloraba desconsolado.
No obstante, Laura se mostraba muy optimista tras saber la decisión de la audiencia y alegre: "Esta experiencia ya la he vivido y ya me toca volverme con mis hijos, no podía más de no saber nada de ellos. Estoy feliz de haber vivido esta experiencia de esta manera, totalmente diferente de la primera". "¡Te queremos!", gritaba Kiko Jiménez, mientras que Arantxa le decía que disfrutase mucho de sus niños.
Kiko Jiménez fue el más afectado tras esta marcha: "Se crea una cosa aquí que para las buenas y las malas es una familia. Un núcleo muy... que por cualquier cosa saltas, por cualquier cosa te ríes. Yo...", el colaborador se llevaba la mano a la cara muy disgustado y hundido. Y de fondo, Laura Matamoros levantaba la mano desde la barca y se iba esfumando su figura cada vez más.
Blanca Manchón, por su parte, señalaba entonces que es algo que hay que entenderlo: "Compartieron 'Supervivientes' cuando empezaron y ahora han empezado de nuevo. Es que es muy fuerte esto". "Lo siento Kiko... es que no se puede controlar", decía Arantxa. "Es una pena porque ya no la ves más", confesaba Kiko, muy afectado. Un Kiko que ha demostrado que a pesar de tener sus más y sus menos con Laura Matamoros en el fondo la quiere y la tiene gran aprecio. Al final, el roce hace el cariño.