Ha pasado menos de un año desde que Alejandro Nieto dejara Honduras, se convirtió en ganador del reality y ahora regresa como fantasma del pasado. Alejandro tenía muy claros sus objetivos y se los contaba a Álex Suárez en este vídeo exclusivo.
El exconcursante llegaba ilusionado a la playa y es que le asaltaban muchos buenos recuerdos, aunque también alguno malo: "Aquí aprendí mucho". El reality le marcó, no solo porque se haya tatuado su apoyo en la piel, también porque pudo comprar su casa y ahora la está reformando.
Lo que más echa de menos es pescar, en su edición se hizo con 191 peces, así que su propósito era hacerlo de nuevo, pero haciendo historia: "Quiero coger el pescado más grande que se haya cogido aquí y quiero dedicárselo a alguien".
Pero también quería transmitir a los concursantes algo que cree que necesitan: alegría, clama y tranquilidad. "Quiero ayudarles, enseñarles a hacer fuego de otra manera porque quiero que todo el mundo haga fuego".
Además, dejaba caer que todos los que salen "hablan de un concursante" que mientras se comporta de un modo ante las cámaras "detrás es otra cosa" y quería comprobarlo: "Yo lo voy a decir. No voy a ir a favor ni en contra de nadie, voy con todos".