Katerina Safarova creía que su momento había llegado. La concursante decía no poder más con la dureza del concurso así que estaba deseando perder en la nominación contra Asraf Beno y Yaiza Martín. Su deseo se cumplió al salvar la audiencia a sus compañeros.
Katerina celebró su eliminación y se despidió de todos sus compañeros, dejando para el final a Manuel Cortés, al que se animó a darle un beso cariñoso en directo. Después, confirmaba en la gala lo importante que había sido el hijo de Raquel Bollo para ella: "Manuel es la persona más especial que me llevo de este concurso. Es una de las cosas por las que más me alegro de haber venido, el haberle conocido".
Cuando la concursante abandonó la Palapa, Manuel también reconoció que le había cogido "mucho cariño". "¿Te imaginas a Raquel Bollo con un gorro de nutria en una boda en la Plaza Roja de Moscú?", le preguntó Jorge Javier Vázquez a Alma Bollo. La hermana de Manuel rompió a reír imaginando el momento. "Si no me he casado con una niña de 3 años casi por el rito gitano, no me voy a casar por un rito ruso", aseguró Manuel.
Poco después, Katerina descubrió la Playa de los Olvidados y en ella a Artùr Dainese y a Jaime Nava. Los tres supervivientes celebraron el reencuentro, aún sabiendo que uno de los tres pondrá próximamente fin a su aventura con la expulsión definitiva en 'Supervivientes: Conexión Honduras'.