Yulen Pereira ha recibido una sorpresa muy especial en 'Supervivientes', la visita de su madre, Arelys. El esgrimista no ha podido contener el llanto cuando ha visto a su madre y la ha abrazado sin mediar palabra. Tras pasar un rato juntos, Yulen se ha sincerado delante de su madre y ha reconocido que Anabel Pantoja y él "son novios", y que está muy feliz de que su madre haya aceptado la relación.
Anabel Pantoja ha sido la encargada de llevar a su "novio" al encuentro con Arelys, su madre. Tras visitar las tres puertas, "pasado" y "futuro", llegaba la puerta del "presente", detrás de la que se escondía la madre de Yulen. Cuando el esgrimista ha abierto la puerta, ha roto a llorar de la emoción y ha abrazado a su madre regalándonos uno de los momentos más emotivos de la edición. Ambos estaban muy emocionados y no se han separado ni un segundo en ese abrazo que parecía interminable.
"Estoy muy bien", le ha dicho Yulen emocionado a su madre. "Nosotros también, está todo bien", le ha dicho Arelys. Madre e hijo se han mostrado pletóricos al reencontrase y han demostrado la conexión tan especial que tienen entre ellos. Además, Arelys también ha querido hacer al padre de Yulen partícipe de este reencuentro: "Papá está muy orgulloso de ti", la ha dicho. Yulen, por su parte, le ha hecho saber a su madre que la nombra todo el rato y que todos sus compañeros la conocen ya.
Tras el reencuentro de Yulen con su madre, Anabel Pantoja se ha unido a su "novio" y a su "suegra" en este momento tan especial. “Para mí esto es un regalo”, ha dicho Arelys al tener a los dos supervivientes abrazos por ambos lados. “Gracias a la organización por dejarme ver a mi hijo y a Anabel”, ha dicho la madre de Yulen emocionada. Además, Yulen ha querido darle un toque de humor al momento y ha presentado a las dos mujeres de su vida. “Vamos a tener que aguantar muchas aventuras juntos”, ha bromeado.
Anabel Pantoja se ha encontrado con Arelys, la madre de Yulen, detrás de la “puerta del presente”. La sobrina de Isabel Pantoja ha reconocido al instante a la que puede llamar “suegra” y se han fundido en un bonito abrazo. Las muestras de cariño, los besos y los halagos no han faltado en este encuentro que se ha caracterizado por la efusividad de ambas.
Arelys ha salido de la puerta con una sorpresa para Anabel Pantoja, su vaso de leche con cacao que ha ganado en la prueba de recompensa. La sobrina de la Pantoja ha enloquecido al ver a la madre de su novio: “Qué guapa eres”. Desde que se han visto, no han parado de hablar y de desvelar los planes de futuro que tienen como “familia”. “Nos gustan las mismas chocolatinas”, le ha dicho Anabel emocionada a Arelys.
“Muchas gracias por cuidar de él”, le ha dicho la madre de Yulen a Anabel. Entre tanto agradecimiento, Arelys ha querido dedicarle unas bonitas palabras a Anabel: “Las puertas de mi casa están abiertas para ti”. La sonrisa no se le ha quitado de la boca en ningún momento a Anabel Pantoja, quien no daba crédito a lo que estaba viviendo. “No es mi madre, pero como si lo fuera. Lo sé todo de ella”, ha confesado.
Además, Arelys le ha hecho un sorprendente comentario refiriéndose a su hijo: “Paciencia con él, paciencia”, le ha transmitido a su "nuera". Anabel Pantoja ha querido bromear con la situación y ha desvelado un comentario que le hizo Yulen sobre su madre: “Me amenazaba y me decía, Arelys a lo mejor no te quiere”, ha dicho entre risas.
Anabel Pantoja ha abierto la "puerta del pasado" y se ha encontrado con la imagen de Omar Sánchez. "Lo esperaba", ha dicho al ver la imagen de Omar Sánchez y que no estaba en Honduras, la superviviente no se lo ha tomado del todo bien.
"Muchas vivencias, no sé qué decirte, para mí él ha sido una persona crucial que siempre le voy a recordar y que me hubiera gustado tener siempre en mi vida, pero obviamente entiendo que es pasado", ha contestado Anabel a Carlos Sobera en un primer momento. "Me encantaría poder verle", ha dicho emocionada, aunque no sabe si "él querrá".
La sobrina de Isabel Pantoja ha terminado rota al hablar de su exmarido: "Antes de venirme ya hablamos muchísimo, me apoyó muchísimo a esta aventura y me dijo que llegará hasta el final. Es un tío que no puedo decir ni 'mu' y no sé si estará o no, pero a mí me tendrá siempre". Y termina llorando desconsolada cuando el presentador le explica que él no esté en la isla no significa que no le esté apoyando fuera: "Es duro. No quiero hacerle daño a nadie, por eso no quiero hablar más".