Una nueva prueba de recompensa llegaba hasta Honduras y lo hacía con sorpresa. Los dos ganadores iban a disfrutar de un premio de lo más especial: ser los primeros en disfrutar del Nuevo Paraíso, junto a un tercero que sería elegido por los compañeros.
Para ello, los supervivientes han tenido que crear su propia caña con bambúes y cuerdas para llegar hasta el chisquero que debían pescar. Una vez conseguido, el siguiente objetivo ha sido hacer fuego. Después de medir la longitud de los brazos de los concursantes, han quedado divididos en dos grupos para que todos jugaran en igualdad de condiciones.
Tania, Alejandro, Yulen, Ignacio y Mariana han sido los participantes de la primera ronda. Cada uno avanzaba con su propia técnica, pero ha sido Alejandro el primero en lograr el chisquero. Mientras todos seguían montando sus cañas, Ignacio ha sido el siguiente en unirse al andaluz en la zona de fuego. Después de un duelo de lo más ajustado, finalmente eran las llamas de Alejandro las que rompían la cuerda.
Kiko, Ana Luque, Anabel, Anuar y Nacho han jugado en la segunda ronda. A diferencia de lo que ha ocurrido en la primera, esta vez Palau lograba la victoria en solitario. Y lo hacía de manera más rápida que el primer grupo.
En el Nuevo Paraíso hay hueco para tres. Alejandro y Nacho Palau se han ganado dos de ellos venciendo en la prueba. Pero aún faltaba un puesto por ocupar. Todos los concursantes han votado a quienes consideraban que eran los tres mejores supervivientes.
Casualidad que Alejandro y Nacho, además de ganar la prueba, también eran los más votados por sus compañeros. El tercer puesto venía con triple empate: Tania, Ignacio y Anuar. Los dos ganadores tenían la responsabilidad de deshacerlo.
Alejandro ha optado por Tania. Nacho por Ignacio. Anuar quedaba fuera pero aún así no se ponían de acuerdo. Finalmente el azar en el juego da pares y nones ha decidido que fuera Ignacio el tercer integrante y esto ha provocado el enfado de Alejandro.