Sofía Suescun ha vuelto al pisito de 'Sola', en esta ocasión para visitar a su madre Maite Galdeano por el día de Navidad. "¡Ha venido mi bebé, que mona, mi pequeña!" ha gritado la navarra al abrir la puerta. "No me lo puedo creer!".
"¿Cómo lo estás llevando?", le ha preguntado Suescun. "Muy bien cariño, estoy encantada. Yo sabía que tenía que tener un reality para mí sola, para que la gente me viera que hago desde la mañana hasta que me voy a la cama. La gente tiene que terminar de conocer cómo soy. Mucha gente no me conoce", le ha respondido ella.
Maite echa mucho de menos a sus mascotas y enseguida le ha preguntado a su hija cómo estaban sus queridos animalitos. La ganadora de 'Gran Hermano 16' le ha contado que sus perros Yaco y Lucía encontraron un jamón que estaba escondido y lo devoraron. "Lucía se pasó toda la noche vomitando, Yaco no", le ha dicho la de Pamplona.
"Hombre, que va a potar, si se ha comido hasta móviles. Mira cuando venían a casa los africanos dejaban los zapatotes esos que llevaban de hombre. Antes de venir a la cama conmigo lo dejaban encima de las escaleras. Yaco que estaba fuera... en fin. A la mañana siguiente se le levantaba el africano...les ha fastidiado Yaco a algo a todos los africanos. Cuando se levantaba se había comido toda la parte trasera del zapato", contaba la exconcursante de 'La casa fuerte' entre risas.
"Hubo otro que dejó el teléfono móvil en la mesilla y Yaco con sus morritos lo cogió, lo machacó en el salón y luego se lo comió el colega. También tenía una cartera super mona, blanquita con dos orejitas y unos dibujos de cerezas. Le arrancó las orejas, la destrozó. Tenía aprensión a la carta de las cerezas", ha explicado 'la elegida de Dios'.
Después de escuchar esta historia, Sofía le ha pedido a su madre que le contara cómo había sido su parto.
"Estaba yo en casa, desayuné. Estábamos a tres de julio y no querías salir aún. Me subí las catorce escaleras y te hacía así para abajo. Pero nada. Por la noche me entraron unos dolores horrorosos, pero pensé, no ahora no, que quiero dormir. ¿Cómo es la cabeza, eh? A la mañana siguiente ya empecé a tener contracciones. Es un dolor como el de la regla, pero mucho más. Tuve que ir corriendo al hospital. Yo venga gritar, y Cristian me miraba como diciendo: "¿Qué pasa mamá?", ha comenzado contando la intérprete de 'La papela del camión'.
"Ya estaba dilatada de cuatro centímetros, me pelaron todo el bosque que tenía, porque la verdad que llevaba un bosque. Yo empecé a quitarme el bosque cuando me divorcié, porque el africano se quedó flipado. Dijo '¿pero qué hay aquí por favor?', hay hasta moras y árboles. Bosque, pero bosque de la pradera, como este espumillón, pero negro entero", se partía de risa Galdeano.
"Les dije que no quería la epidural porque con Cristian pasé tanto dolor que estaba acostumbrada ya. La comadrona casi me pega. Me dijo: "Que te doy un bofetón". De la mesa de registros a partos ya e iba sacando la cabeza. Me dijeron que haría fuerza, me agarré a los clavos como Jesucristo y ale. Me dolió muchísimo, yo pensé que me quedaba muerta en la camilla. Salió y no oía nada. Me empezó a dar un ataque y empecé a gritar: '¿Dónde está mi hija? Dámela, dámela' Te metieron la cabeza debajo del agua y empezó un llanto tan dulce...No aguantaba más y cuando me estaban cosiendo mis partes te cogí", contaba Maite ante el asombro de su hija.
"Parecías una india, los ojos chinos, la boca así de serie que traes, unas manos finas de pianista, súper morena... me traen cien mil bebés y te hubiera reconocido", ha dejado claro la exconcursante de 'GH 16'.