Mayra Oyola-Merced, colaboradora de la NASA: "Es posible que España sufra un huracán de categoría 5"


El cambio climático está haciendo que el Atlántico se caliente y que los huracanes se desplacen a regiones, como España, donde no habían sido habituales hasta ahora
NIUS ha hablado con una experta que asegura que "no debemos tener miedo, pero sí prepararnos"
Y alerta de que si llegan a Europa "los países que primero se verán afectados son los que tienen costa, como España o Portugal"
Lo hemos constatado con 'Danielle'. El cambio climático está haciendo que los huracanes lleguen a lugares imprevisibles, como lo era España hasta hace bien poco. Y aunque este ciclón tropical ha alcanzado nuestro país debilitado, en forma de borrasca, aún seguimos notando sus efectos, temperaturas otoñales, tormentas y fuertes rachas de viento. ¿Qué hubiera ocurrido de tocar nuestro país como huracán? ¿Es posible que suceda algo así? ¿Debemos acostumbrarnos a esta amenaza? ¿Estamos preparados para enfrentarla?
Responde a NIUS Mayra Oyola-Merced, colaboradora de la NASA, experta en física y predicción atmósferica. Nos atiende desde la universidad de Wisconsin, donde imparte clase, y su respuesta es rotunda. "La amenaza es real. España podría sufrir los efectos de un huracán y debería prepararse para ello", sostiene. "No es descabellado".
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Pregunta. Entenderá que a muchos les cueste creerlo. ¿De verdad que podría llegar a la Península un huracán de categoría 5, como el Katrina?
Respuesta. Existe la posibilidad, quizá sea pequeña, porque al entrar en contacto con aguas más frías los huracanes pierden intensidad, también porque España está cerca del área donde se están formando estos nuevos huracanes y para que este fenómeno coja fuerza necesita tiempo... pero el cambio climático está trastocando todo lo que conocíamos y estamos viendo huracanes que se intensifican en menos de 48 horas y temperaturas elevadísimas del agua en zonas altas del Atlántico que nunca se habían registrado, así que no es imposible. Esperemos que no, porque sería obviamente devastador. Yo soy de Puerto Rico. He visto huracanes de esa categoría. He visto a mi familia sufrir por el huracán María que asoló el país en 2017, a tal punto que todavía hay partes en la isla que se están recuperando de este huracán. Así que es importante tomar estas cosas bien en serio.
No sabemos si algo así va a pasar, pero todo indica que es posible. Y de ocurrir, los países que primero se verán afectados son los que tienen costa, como España o Portugal, por ejemplo.
P. Los expertos coincidís en que lo más normal es que si llegan a España sean de categorías más bajas, uno o dos. ¿Nos podemos relajar?
R. No. Es un error extendido, pensar que los huracanes de categoría baja no hacen daño o que las tormentas tropicales son más inofensivas...Obviamente tendríamos que ver el impacto directo, la dirección, la marejada ciclónica, porque lo que realmente hace mucho daño durante un huracán es la marejada ciclónica, o sea, el agua. La velocidad del viento es básica a la hora de categorizar un huracán y los vientos también causan problemas, pero lo más letal y dañino que tiene un huracán es el agua, y puede ser de categoría inferior pero llevar mucha agua.
Además no solo hay que tener en cuenta la categoría, también hay que estar pendiente de cuáles son las condiciones del área, si antes de que entre este fenómeno ha llovido mucho o lo opuesto, si hay sequía y el terreno está erosionado, ambas cosas pueden ser fatales porque puede haber derrumbes.
P. Pues en España tenemos una grave sequía...
R. Exacto, en España ha llovido poco y ha hecho mucho calor este verano, sé que ha habido incendios forestales fuertes, así que cuando tenemos esa erosión prevalente, si entra un huracán y empieza a llover fuertemente el riesgo de derrumbes es enorme.
P. ¿Está España o Europa, en general, preparada para recibir un huracán?
R. No y deben hacerlo. Tener planes de contingencia en caso de que eso pudiera ocurrir. Prepararse antes de que la temporada de huracanes llegue, que por lo general va del 1 de junio hasta el 30 de noviembre.
P. ¿Cómo nos podemos preparar para recibir un huracán en España?
R. Pues una de las cosas fundamentales para las personas, obviamente, es preparar sus casas, ver si viven en áreas que son propensas a inundaciones, a vientos... Tener un plan de desalojo si nuestro hogar no puede aguantar vientos de ciertas categorías, o si estamos cerca de la costa y se puede inundar. No solo individualmente, sino un plan del Gobierno.
Otra de las cosas sería hacer acopio de alimentos enlatados que puedan durar si no hay refrigeración disponible. Lo mismo con los medicamentos. Las personas con determinadas patologías que necesitan una medicación fija deben contar con una reserva en casa. Es importante porque obviamente en un caso de emergencia no vamos a saber en cuánto tiempo podemos reemplazar o obtener una nueva receta o nuevos medicamentos.
Y por último tiene que existir una comunicación entre las oficinas de gobierno, las oficinas locales de manejo de desastres y de emergencia y la población. Es fundamental para el gobierno educar a la población, y es bien importante para la población en general, mantenerse al día y educarse sobre cuáles son los posibles impactos de huracanes o cualquier otro tipo de desastres en su área.
P. Solo de escucharla asusta...
R. A mí no me gusta nunca utilizar la palabra asustar. No hay que tener miedo, hay que estar preparado porque eso es lo que nos va a ayudar a enfrentar una emergencia así. Si llegara a producirse es una situación seria, por eso requiere preparación, cautela y calma.
P. ¿Ha abierto Danielle el camino a otros huracanes, aunque haya llegado transformado en borrasca?
R. No podríamos decir con exactitud si el próximo huracán o tormenta que se forme en el Atlántico va a llegar a España en estos momentos, pero si seguimos con los patrones que existen actualmente de calentamiento del océano y de cambios de vientos, si sucederá. Tristemente es uno de los efectos del cambio climático.
P. Por lo menos los avances tecnológicos permiten predecirlos antes...
R. Bueno, la verdad es que cada vez son más difíciles de predecir. Es cierto que tenemos satélites y modelos meteorológicos que son muchísimo más avanzados y precisos a la hora de hacer un pronóstico que los que había hace diez, 20, 30 o 50 años atrás, que fue cuando se comenzaron a realizar los modelos meteorológicos en el ordenador. Eso nos permite predecir con una anticipación de 7 u 8 días la formación de una tormenta con bastante exactitud, pero cuando hablamos del pronóstico de la temporada completa eso se está haciendo cada vez más complicado. Precisamente por el cambio climático, porque están pasando cosas en la atmósfera inesperadas, que no ocurrían en el pasado y que están cambiando este tipo de fenómenos.
P. Esta temporada de huracanes, de hecho, se habían pronosticado muchos más de los que está habiendo...
R. Sí, la mayoría de aspectos que se tienen en cuenta a la hora de pronosticar huracanes ahora mismo indican que tendríamos que estar viviendo una temporada fuerte. Sin embargo está siendo mucho más baja de lo normal. Quizá se retrase, ha ocurrido antes, en el pasado hemos visto temporadas que han llegado hasta diciembre. O quizás estamos viviendo una nueva situación. Los expertos estamos viendo un proceso científico en vivo y a todo color, y a medida que estamos haciendo descubrimientos sobre cómo el cambio climático y estas nuevas condiciones están afectando el Atlántico, estamos aprendiendo cómo podemos mejorar esos pronósticos.
P. ¿Qué consejo daría a una población como la española que no está acostumbrada a los huracanes?
R. Que busquen fuentes de información que sean fidedignas. En las redes, desgraciadamente, hay muchas personas que lamentablemente no están preparadas y quizás muchas veces lo que hacen es meterle miedo a la gente. Así que es bien importante buscar siempre estas fuentes en las que se puedan informar apropiadamente para tomar la mejor decisión para ellos y para sus familiares.
Y luego recordarles que el cambio climático está aquí, ya no podemos prevenirlo porque estamos viendo sus efectos. Ahora hay que adaptarse y una parte esencial de la adaptación es tener el conocimiento y la preparación en caso de que uno de estos huracanes llegue a tocar el lugar donde vivimos.