Rocío Carrasco habló alto y claro en ‘Montealto’ y decidió enviar un mensaje al entorno de Gloria Camila. Dijo que no metía a su hermana en el mismo saco que al resto de su familia y advirtió a su entorno que no ‘echara a la niña al ruedo’ y que no la manipularan con mentiras. María Patiño decide contarle a Gloria, la razón por la que su hermana se alejó de ella.
“Siempre he tenido una versión, la de Antonio David, escuché a Roció y decidí profundizar… La fecha clave es 16 de marzo 2012, hasta aquí tenía relación con sus hermanos era buena”, ¿qué pasó entonces? “Aquí Rocío decide aislarse de sus hermanos, de los medios”.
“Este día, Antonio David solicita un cambio de medidas respecto a la custodia de su hija, alegando que su hija es maltratada por su madre, que no tiene los cuidados que debe tener una niña cuando está con su madre, Antoni David pide 15000 euros de pensión compensatoria y 3000 euros mensuales por sus hijos”. Es aquí cuando todos son sometidos a varios informes psicosociales.
Fiel Albiac, Rocío Carrasco, los hijos, Antonio David e incluso Olga Moreno Todos. Y todos podemos tener acceso a esos informes. “Rocío Flores ahí habla de que es maltratada por su madre, que Fidel maltrata a su madre y que vive en una casa de temor, abandonada, porque su madre no le atiende como madre. Después de esos informes, se concluye que Rocío niña está manipulada por su padre, obligada a mentir para favorecer a su padre, que Rocío no está maltratada por Fidel y que Olga Moreno es una mujer sumisa que solo interviene a las preguntas de los psicólogos cuando Antonio David lo permite”.
Y aquí llega lo que María quiere aclarar: “Todo estos informes continúan hasta el día en el que Rocío agrede a su madre. Las conductas que no son sanadas, son malas de por vida. Por eso Carrasco cuando ve a su hija, que a pesar de tener 25 años, sabe que no está rehabilitada porque su padre se aseguró de que no hiciera la rehabilitación. Por eso, Gloria, Rocío dejó de tener relación contigo porque no pudo más, porque no tenía fuerzas para levantarse de la cama, hasta el día de hoy, que ya está mejor y puede hablar”.