Toni Acosta es Mayte

Madre de dos hijos, separada y a menudo desbordada por las circunstancias, es una mujer todoterreno que siempre va corriendo a todas partes. Acostumbrada a hacer malabares con su precaria economía, es una buscavidas con mil artimañas que saca a su familia adelante sin ningún tipo de ayuda. Quizá por eso Mayte es experta en fingir una gran entereza y en intentar que su día a día no le sobrepase. Es atractiva, pero no tiene ni tiempo ni dinero para poder sacarse más partido. Ha pasado por diversos empleos y actualmente trabaja como vendedora de Turbo Thunder 3000, un robot de cocina de última generación.

Malena Alterio es Lourdes: la mejor amiga de Mayte

Funcionaria de las de toda la vida, está casada con un policía y trabaja haciendo DNI en la comisaría del barrio. Es una mujer irónica y echada para adelante que está cansada de tragar con todo y ya no se calla ni una, por eso dice las cosas tal cual las piensa, sin filtros. Su ADN policial le hace no soportar las injusticias. Madre de una hija resabiada y respondona, su carácter, su capacidad de decisión y su enorme templanza incluso en las situaciones más extremas, la convierten inevitablemente en una líder nata.

Mamen García es Amparo: vecina de Lourdes

Es una abuela coraje que cuida incondicionalmente de su nieto Omar como si fuera su propio retoño, puesto que su hija y madre de la criatura es una joven desentendida y vividora que pasa largas semanas fuera de casa sin dar ningún tipo de explicación. Amparo es una abuela fantástica, a veces muy moderna para su edad, de buen fondo y cariñosa. No obstante, también sabe ser estricta cuando la ocasión lo precisa. Trabaja de portera en su edificio y siempre anda fregona en mano. Su marido, Alfonso, está en coma vegetativo en una residencia y ella le visita asiduamente para contarle todo lo que le acontece, ya que en ocasiones no puede evitar sentirse tremendamente sola.

Nuria Herrero interpreta a Virginia

Madre de una niña de seis años, felizmente casada y embarazada de ocho meses. Trabaja como cajera en un supermercado y sus constantes cambios de humor son parte de su personalidad. Virginia es joven, sensible y tiene respuestas y salidas propias de alguien ingenuo y naif, pero no es ninguna mosquita muerta y, en ocasiones, demuestra un fuerte carácter. Vive feliz con Carlos, su marido, un joven diseñador gráfico en paro que se desvive por ella.