Lucía Pariente se enfrentó a "la sala de la verdad" a sus frentes abiertos en la casa de Guadalix: Luca Onestini, Adara, Cristina Porta e Isabel Rábago.
El primer encuentro lo protagonizó con el italiano y la periodista. Cristina Porta, tras ver las imágenes de Lucía Pariente, le dedicaba una rotunda frase: "Me doy cuenta de lo orgullosa que estoy de la madre que tengo y de los valores que me ha inculcado". Lo que le hacía reprochar a Alba Carrillo, mientras los concursantes la escuchaban que "ella también" lo está de su madre.
Tras este enfrentamiento y los duros reproches entre Lucía y el dúo, en 'La casa de los secretos: Última hora' se han podido escuchar las palabras de Luca Onestini y Cristina Porta hacia madre e hija. ¿Por qué tenía que hablar ella todo el rato?, se pregunta Cristina y el italiano responde: "Estaba hablando de nada todo el rato, es una tocapelotas". La concursante le explica a su compañero que Alba grita desde plató que "han hecho edredoning", algo de lo que él no se había enterado. Y por último, la periodista sentencia: "Están igual la madre y la hija. Pero esta señora es que no se puede aguantar y la hija peor".
Tras esto, mientras Lucía hacía su cara a cara con Adara, Luca y Cristina eran espectadores directos. "Que vergüenza" es el pensamiento del italiano de las palabras de Lucía hacia su compañera: "Es falsísima". Cristina por su parte no entiende por qué "está todo el mundo con Onestini en la boca", por su parte, Onestini cree que Lucía es "una manipuladora incapaz" porque está intentando manipular todo el día "sin poderlo hacer".
Isabel Rábago también se desahoga con Luca Onestini de las palabras que ha tenido que escuchar de Lucía en "la sala de la verdad" y termina con otro enfrentamiento con Lucía en la cocina: "Has vuelto a sacar un tema que estaba zanjado". Explicaciones con las que Isabel no está nada de acuerdo: "No estoy sacando ningún tema, de lo que yo hablo contigo, hablo contigo".
Toda esta tensión en la casa termina haciendo estallar a Sandra Pica, la concursante asegura "que le puede la rabia" y está muy enfadada con gran parte de sus compañeros: "Yo no puedo compartir rato con gente de esta casa que le importa todo una mierda, como Luca o Cristina. La gente que disfruta haciendo daño me da asco". Lucía le pide, por favor, a su compañera que no caiga en este juego: "Se acabó".