Adara Molinero ha tenido una intensa en 'La casa de los secretos: Cuenta Atrás' y es que tras tener varios enfrentamientos con algunos de sus compañeros de la casa, entre ellos la "sala de la verdad" con Cristina Porta, ha podido recibir la visita de Rodri y además, se ha enfrentado a su "línea secreta de la vida".
La concursante ha sido más sincera que nunca en su línea de la vida, de la que ha asegurado que tenía "miedo" de hacerla porque se la pueda juzgar, pero esto no ha hecho que cuente sus momentos más y menos felices.
Adara ha explicado que desde que salió de la casa de Guadalix y enamorarse "en cierta manera" de Gianmarco, se rompió la familia que ella tenía y ahí es donde destaca el momento más duro de toda su vida: "Tuvimos que hablar Hugo y yo de lo que tuvimos en común. Pasé muchísimo miedo, no por él, por la situación. Pensaba que me iba a quedar atrapada en Mallorca hasta que mi hijo fuera mayor de edad". "Afortunadamente llegamos a un acuerdo", algo por lo que ha querido decirle a Hugo que se lo agradecerá siempre: "No me puedo creer que esté contando todo esto".
Ella, ha recordado lo que pasó tras esto y su salida de la casa de Guadalix: "La gente quería que yo inmediatamente estuviera con Gianmarco, no podía estar con él, quería gritar que tenía algo más importante para mí que era mi hijo. Estaba pensando en otras cosas. Primero que nada soy madre". Y ha asegurado que cree que al italiano "la situación le vino grande y se agarró a lo primero que vio y cogió sus maletas y volvió para Italia".
Momento en el que ha querido destacar Rodri, que tras las informaciones que sacó Gianmarco sobre los famosos mensajes entre ellos, ha afirmado que fue un gran apoyo para ella: "Este chico de aquí se quedó cuando yo estaba desesperada, destrozada, que no sabía que hacer. Rodri estuvo conmigo". Todo esto hizo que se unieran, aunque también les afectó que ella no pasaba por su mejor momento: "Ojalá hubiera empezado con Rodri de una manera bonita y que yo estuviera bien".
Adara ha desvelado algo de lo que su madre se ha enterado en directo: "Después de un año, seguí criando a mi hijo y me empezó a pasar que en situaciones de mi vida me empezaron a venir flashes de mi infancia y me tuve que separar un poco de ella y le pido disculpas, pero es que no lo podía controlar". Ella no ha querido profundizar, pero sí disculparse con su madre: "Lo siento muchísimo, lo hizo lo mejor que pudo. Es una de las personas más importantes para mi". Tras retomar su relación con ella, estar asentada en Madrid con su hijo, llega su estabilización.
Rodri, tras subir a dar la sorpresa a Adara y sellar su amor con ella en la casa de Guadalix, ha mirado muy atento su línea de la vida y explica cómo se ha sentido: "Sé muchas cosas que han pasado de ella, le he visto sufrir mucho y muy mal y ver que poco a poco está bien, no sé explicártelo. La gente que ha estado con ella este ultimo tiempo en casa lo sabe y ver que remonta y es feliz me alegra".