Kiko Rivera llegó a 'Sábado Deluxe' dispuesto a reconocer que había sido desleal a su mujer, Irene Rosales y dejar zanjado, de una vez por todas, este tema. El hijo de Isabel Pantoja se abrió en canal y habló de otros temas que tenía pensado tocar. Fue así como confesó que se encontraba muy triste, decaído y que no se quería.
Los colaboradores consideraron que Kiko podría estar padeciendo una especie de depresión y le dijeron que debería pedir ayuda profesional. Él se mostró preocupado porque este asunto apenas lo había hablado con Irene y, además, a su madre no le había dicho nada: "Se estará enterando ahora", dijo. La tonadillera decidió intervenir en el programa a través de una llamada telefónica.
Isabel se mostraba muy emocionada a juzgar por su tono de voz y quiso dedicarle unas palabras a su hijo después de saber cómo se encuentra: “Nunca te hemos dejado solo. Quiero que sepas que tú nunca vas a estar en el suelo, nada más que cuando te toque, mientras tenga tu madre vida. Tienes a tu mujer que siente adoración por ti y tienes una familia que nos morimos por ti”. Estas palabras han hecho llorar a Kiko.
Después de esto ha llegado un pequeño tirón de orejas por parte de Isabel: “No quiero que sigas hablando de esos temas, te hace mal y me hace mal. Piensa que estamos sanos, hay una pandemia en el mundo, lo que tú estás pasando no es importante. Han fallecido millones de personas, eso sí es importante. Lo tuyo se puede curar. Tienes que tener el valor de decirle a tu mujer, a tu madre, que estamos aquí pendiente de vosotros. Tardo cero coma en llevarte a donde te tenga que llevar. Me lo tenías que haber contado antes porque me has dejado trastornada”.
“¿De qué estás triste tú? ¿Por qué no hay trabajo? A ti no te va a faltar un plato de lentejas”, continuaba diciendo Isabel. Pero esta intervención no ha terminado de gustar a Kiko, pues consideraba que su madre le estaba diciendo que “no tenía derecho a estar mal”: "Me duele que me digas eso. No comparo mis sentimientos con nada, pero simplemente he contado cómo me siento. No puedo fingir estar bien. Si he provocado un daño, lo siento. Necesito abrazos y besos, no que no tengo derecho a estar así".
Durante la intervención de la tonadillera, María Patiño a llegado a opinar y lo que ha dicho se ha escuchado. Sus palabras han sido "qué egoísta", haciendo alusión al momento en el que Isabel estaba quitando importancia al dolor de su hijo para decirle que "hay cosas más importante" porque "hay una pandemia" y "lo suyo tiene solución".
La presentadora pide disculpas alegando que en ese momento estaba empatizando con el dolor de un Kiko Rivera muy emocionado y destrozado que necesitaba palabras de cariño y no un tirón de orejas: "Si te he ofendido, te pido disculpas. Entiendo el sufrimiento que estás pasando. Te garantizo que hacía tiempo que no vivía un testimonio tan de verdad como el de tu hijo".