La entrevista de Cristini Couto ha sido tremendamente dura. La brasileña ha explicado que su infancia fue un infierno, ya no solo por el hecho de que su familia no aceptara su transexualidad, si no también porque sufrió abusos por parte de su tío.
Tal y como ha explicado, cuando era apenas un adolescente, el marido de su tía abusó sexualmente de ella, algo que no pudo contar porque él la tenía amenazada de muerte. Además, sufrió mucho por los malos tratos que recibía a manos de su hermano, quien le pegaba palizas y se avergonzaba de ella: "Me encerraba en una despensa con el perro y el gato para que sus amigos no me vieran porque no quería que vieran que su hermano era un maricón".
La llegada de Cristini a España tras comenzar con su cambio de género no fue más sencilla. Cristini ha explicado que nada más llegar a nuestro país entró en el mundo de la prostitución: "Empecé a trabajar en Madrid en la casa de campo y allí tuve muchos problemas porque no me aceptaban por ser extranjera".