La noticia acapara el foco mediático: Ángela Dobrowolski, la mujer de Josep María Mainat, habría sido detenida por un presunto intento de asesinato del productor. Al parecer, Ángela le habría inyectado insulina hasta que quedó en coma.
Sabemos que Ángela fue puesta en libertad pero tiene que personarse cada semana y ‘Sálvame’ nos transmite ahora las primeras declaraciones del productor, que ha respondido a los mensajes de varias colaboradoras.
El productor asegura estar “bien”, apunta que el suceso tuvo lugar hace ya tres meses y añade: “La investigación sigue en marcha y ya se verá cómo evoluciona”. Eso sí, no quiere entrar en más detalles y fija su postura con respecto a la polémica: “No vamos a hacer declaraciones”.
“Él estaba convencido de que su mujer, después de lo que pasó, había querido asesinarlo”, asegura Toni Muñoz, periodista de ‘La Vanguardia’ que ha sacado a la luz la noticia. De hecho, cuenta que en un primer momento no sabía si quería interponer una denuncia y por ello fue su hijo, Pol Mainat, el que tomó medidas legales y luego fue él quien ha seguido impulsado esta causa contra su esposa.
Sin embargo, añade que llama la atención que él “no cortó por lo sano” con ella después de lo sucedido: “Tienen dos hijos en común muy pequeños y consideró que no se podía privar a sus hijos de ver a su madre”.
“Desde el minuto uno que recobra la consciencia del coma se da cuenta de que lo han intentado asesinar”, ha adelantado en primicia el periodista. Pero ¿Por qué? Porque nunca había sufrido una crisis de hipoglucemia así y porque su exesposa entró por la noche para inyectarle esas “dosis” de algo que le dijo que eran vitaminas: “Él sospecha que esas sustancias no eran eso”.