Alonso Caparrós estaba intentado saber cómo había pasado Chelo García Cortés sus primeras 18 horas con los dos brazos escayolados por la módica cantidad de 2.000€, pero un constante y cada vez más elevado pique entre Belén Esteban y Kiko Matamoros ha interrumpido la conversación: “A mí no me hagas “chu”, yo ya no me callo ni debajo del agua… ni contigo ni con nadie me callo”, afirmaba una Belén muy molesta.
“Vienes muy revueltita hoy”, le recriminaba un Matamoros que no parecía estar dispuesto a entrar en discusiones mayores. Caparrós ha querido saber qué había sucedido y les ha pedido una explicación “estoy de presentador, dejadme que me luzca”, pero los colaboradores han guardado silencio.
Sin embargo, ya sabéis que un micrófono abierto por descuido puede ser muy revelador y mientras que Chelo y Gema hablaban sobre su enfado, se ha escuchado a Matamoros decirle a Belén: “Parece el Rey pidiendo perdón en Botsuana”. Un comentario que como era de esperar Belén ha respondido con un “No me toques las narices otra vez”. Recordemos que la Esteban ha prometido no volver a hablar ni del Rey ni de política en el programa. Pero más allá de todo estó… ¿Qué ha pasado entre ellos? ¿Por qué se ha enfadado Kiko? ¿Terminará estallando una discusión mayor entre ambos?
Tan solo unos minutos antes, la tarde en el cortijo comenzaba con Alonso Caparrós piropeando a Lydia Lozano, riéndose con la camiseta de Gustavo y preocupándose por la salud de Belén. La copresentadora estaba cómo tristona y el presentador sustituto, ha querido saber cuál era el motivo. “Nada, es que he estado malita”, le explicaba Belén. Al parecer ha estado un poco pachucha, pero ha dejado claro que no se trata de nada grave.