La semana pasada, Lydia Lozano se enteraba de que ya no tenía la opción de maquillarse y peinarse para ponerse delante de las cámaras de ‘Sálvame’. Según ha contado hoy Belén Esteban, su compañera está tan afectada por esta nueva norma (los servicios de maquillaje y peluquería de Mediaset se redujeron drásticamente por la prevención contra el covid), que llevaría varios días “llorando” por los distintos platós de esta cadena.
“Yo sé que Lydia estuvo llorando antes de entrar en el debate de ‘Supervivientes’ porque se ha quedado sin maquillaje y peluquería”, ha dicho, y esta confesión le ha hecho mucho daño a la colaboradora. “Yo lloré porque hubo un problema interno en cuanto a eso y me produce mucho agobio”, ha dicho, por lo que Jorge Javier Vázquez ha deducido que “lleva cuatro días llorando” porque ya no pasa por chapa y pintura cuando viene a la tele a trabajar.
Otra vez con las lágrimas en los ojos, Lydia Lozano ha explicado cuál fue ese problema interno que tanto le afectó: “Es que yo llegué con el pelo mojado y hubiera sido un detalle que a las 20:00 horas alguien me hubiese avisado de que no me iban a peinar. Porque Bulldog me maquillaba y me peinaba pero no llgó la orden”, ha dicho, a lo que sus compañeros le han recordado que ya se lo dijeron los Kikos la semana pasada.
Sin embrago, Lydia se tomó esa 'jugarreta' de sus compañeros como una broma, o como algo que sólo iba a pasar un día, y no esperaba que no tuviera peluquería el domingo. Ha recordado que tiene el brazo "muy mal" (lo tiene como dormido), a lo que Belén Esteban le ha contestado: "Lo que no se entiende es que puedas bailar y no te puedas secar el pelo". Kiko Matamoros también ha sido muy crítico con lo mucho que le afecta este tema a Lydia: "Ni que fueras una estrella de cine".