Kiko Hernández suele llamar a Carmen Borrego 'Potota'. Es una broma, ya que a la hermana pequeña de las Campos la llamaban 'Cotota' en 'Día a día', pero esto sumado a la polémica con la familia Campos en general han generado el debate en 'Viva la vida'.
Alejandra Rubio, sobrina de Carmen, no entiende qué pasa, cree que este tipo de calificativos suponen son ganas de “humillar” a la gente, Kiko Matamoros le decía que solo es una gracia y Carmen Borrego le pedía que le mirara a los ojos: “No es una gracia, no es necesario humillar a las personas, a mí me han educado para no hacerlo”.
El aludido no quiere responder a la hija de Terelu Campos, cree que es muy joven y está “a años luz” a la hora de saber cómo hacer televisión: “Cuando pasen unos años, hablamos de lo que hay que hacer y de lo que no”.
Para él, la principal damnificada es la propia “Potota” y es que no entiende el doble lenguaje de Carmen, ya que se llaman en multitud de ocasiones, en privado también la llama “Potota” y ella le responde bromeando con que le va a mandar salchichón de Málaga…
“Si realmente quisiera humillar, me subía al pulpillo a leer las conversaciones que hemos tenido tú y yo a lo mejor tu marido hoy se marchaba de casa”, advertía el colaborador y es que ya nos ha contado que Carmen solo habla con él cuando no está su marido, porque no le cae bien.
El enfado del colaborador iba a más a medida que veía las declaraciones de Carmen y, para demostrar su verdad, mostraba los mensajes a Jorge Javier Vázquez: “Eres una mentirosa de libro, de manual, de enciclopedia. No te voy a llamar Potota, te voy a llamar mentirosa y embustera”.
Además, ha acusado a Carmen de no estar al lado de su madre en los últimos días de polémica a raíz de su conflicto con Jorge Javier Vázquez: “Estate más con tu madre, un poquito… Cuando la llames que luego te acuerdes de lo que le has dicho”. Es más, cuenta que la presentadora vive con cierta soledad en su casa.
Por otro lado, Carmen deja caer que no le gusta que su madre haya invitado a Kiko a su casa para que le presentar a sus hijas y el aludido no daba crédito, de hecho, ha demostrado que la propia Carmen quiso quedar con él para documentarle una información, es más, iba a acudir a la comida en casa de su madre pero finalmente no fue: “¡Qué hartura! ¡Qué mentirosa eres, tía! ¡Qué barbaridad! ¡Qué asco!”
“Como te crezca la nariz como a pinocho se te va a poner como la papada”, bromeaba el colaborador.