Del tímido "gracias" de Julia Janeiro a su charla fuera de cámaras con Omar Suárez: "Es una niña tímida y muy educada"
Julia Janeiro se mantenía en silencio ante las preguntas pero esta vez sí se despedía con un tímido "gracias"
El reportero de 'Sálvame' Omar Suárez ha podido hablar con la hija de María José Campanario y Jesulín de Ubrique fuera de cámaras
Omar Suárez daba las gracias a Julia: “Me ha dicho que no quiere hablar ni responder pero que entiende, comprende y respeta nuestro trabajo"
Julia Janeiro se mantiene impasible ante las preguntas de la prensa. Está en el centro del foco mediático desde que cumpliera 18 años pero ella hace su vida normal, entra y sale de la casa en la que convive con su novio, se va con su chico y queda con sus amigas… en estricto silencio.
Esta vez, quien se ha presentado ha sido el reportero de ‘Sálvame’ Omar Suárez, que lanzaba todas sus preguntas y se despedía dando las gracias ante su no respuesta. Julia decía adiós con un tímido “gracias” por primera vez y Omar pedía a su cámara que dejara de grabar para poder charlar con ella.
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Ya sin cámaras, el reportero ha podido charlar con ella, le ha dicho que le perdonara pero que entienda el interés que suscita y con su respuesta se ha dado cuenta de que se trata de una chica “tímida”: “Le cuesta mantener la mirada y es una niña súper educada”.
“Me ha dicho que no quiere hablar ni responder pero que entiende, comprende y respeta nuestro trabajo, así que yo le doy las gracias a Julia Janeiro porque me ha parecido súper educada”, añadía el reportero de ‘Sálvame’.
Kiko Hernández recibe llamadas de las compañeras de colegio de Julia
Sin embargo, las compañeras de colegio de Julia han alzado la voz en su contra. Aseguran que es mentira lo que se ha contado de supuestos episodios de abuso escolar y añaden que estaba "obsesionada" con que se filtrasen fotos suyas, lo que suponía una "tortura" ya que les castigaban y registraban las mochilas.
Además, una de ellas asegura que tras verle con el móvil, sospechando que le había hecho fotos, se habría vengado: "Me metió la cabeza en el váter".