Anabel Pantoja ha sido tercera finalista de ‘El tiempo del descuento’ y en plató estaba Irene Rosales, mujer de su primo, para recibirla. La colaboradora no tiene palabras para agradecérselo ya que Irene, aunque había sido su defensora, acababa de despedirse de su madre, que había fallecido apenas unos días antes.
Sin embargo, echó en falta que allí estuvieran también sus primos, Kiko Rivera e Irene Rosales. Él estaba trabajando en Barcelona y ella en casa con el niño, pero Anabel decía: “Mi ilusión era que estuvieran los dos como yo estuve para recibirlos a los dos. Me habría gustado que me abrazaran”.
La colaboradora ha vuelto y se ha encontrado con una bromita de la dirección de 'Sálvame'. Ha bajado las escaleras, pero el público ni aplaudía ni la miraba: estaban en absoluto silencio comiendo una barrita de chocolate, el alimento que más ha echado de menos la colaboradora durante su estancia en el concurso.